Transparencia, pero con límites al respeto a la persona: Huesca

El arzobispo dijo sobre la ley en la materia que “si no respeta los derechos legítimos e íntimos, está pasándose de la raya”

Olivia López Pescador

La ley de Transparencia y Acceso a la Información Pública es un avance democrático y cívico para la comunidad, pero debe tener como limite el respeto a la persona humana, en todos sus aspectos, expresó el arzobispo Rosendo Huesca y Pacheco.

El arzobispo de Puebla, luego de manifestar que hoy en día cualquier tema “ya es considerado como electoral” —un tanto cauteloso, para no violentar la ley electoral al emitir su punto de vista sobre la transparencia y otros temas— señaló que sólo cuando algún tema vaya en contra de la moral, de la vida o del propio ser humano, va a opinar al respecto, aunque lo censuren.

“Por ejemplo, en el aborto, siempre estaré en contra, aunque me digan que estoy favoreciendo a equis partido y dañando a otro, a mí ahí no me interesa lo electoral, sino el respeto a la vida humana.”

Sobre el aspecto de transparencia, remarcó que ésta debe tener como límite a la persona humana que es sagrada en todos los aspectos, tanto en la pena de muerte, en el aborto, en la esclavitud, debe ser respetada.

“Una ley de transparencia que no respete los derechos legítimos e íntimos de la persona, está pasándose de la raya, para mí.

“Lo importante en una ley de transparencia es cómo se utiliza el dinero público y luego los procesos electorales, qué errores o trampas se cometieron. Pero la ley no debe invadir intimidades, ni qué bienes tiene, ni deben invadir las casas, ni revisar las cuentas bancarias a no ser que equis persona esté lavando dinero.”

Por otro lado al citar el catecismo de la Iglesia Católica —al abordar el asunto de la ley de voluntad anticipada— explicó que en la interrupción de tratamiento médico oneroso y la utilización de equipo, el enfermo o su familia pueden renunciar al mismo y aceptar la muerte, lo cual es moralmente correcto, pero también pueden renunciar a dicho tratamiento por resultar peligroso.

“Con no aceptar esos tratamientos, no se está suicidando, sino que está evitando riesgos innecesarios.”

El arzobispo explicó que cuando la muerte es inminente, los cuidados no pueden ser interrumpidos, es decir, no se le puede quitar el marcapasos o suero o los aparatos que ya tiene, pero sí puede donar todos sus órganos y optar por no recibir ningún medicamento más, sólo los que le quitan el dolor intenso, aunque acorten su vida.

Tras hacer alusión a la tragedia de la discoteca News Divine, señaló que la juventud hoy en día vive en un mundo muy confuso. Espera que los empresarios de los centros de diversión les ofrezcan espacios seguros “en todo sus aspectos es decir, que partan del respeto a la integridad de la persona humana. Antes de ser reguetoneros, son personas humanas, que valen mucho. Que no se les ofrezca ni alcoholes ni drogas, ¡bueno, con lo de alcohol, estoy como soñando!, pero por lo menos drogas ¡fuera! y mucho menos a los adolescentes.”

Después de la renuncia de Joel Ortega a la Secretaría de Seguridad Pública del DF, al igual que otros funcionarios, así como los ceses de servidores públicos, comentó que, desde su punto de vista, esto es una prueba de que la opinión pública bien guiada, bien “iluminada” puede apoyar decisiones correctas de los gobernantes.

“Yo pienso que las decisiones hasta ahorita, las veo correctas.”

En temas pastorales, Rosendo Huesca aprovechó para hablar acerca de la XXIII Jornada Mundial de la Juventud a celebrarse en Sydney, Australia del 15 al 20 de julio; el mensaje del papa Benedicto XVI en esta jornada será: “Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros y seréis mis testigos.”