Montero confirma cambios en el gabinete

Efraín Núñez Calderón

Mario Montero Serrano, secretario de Gobernación, confirmó la salida de la procuradora Blanca Laura Villeda Martínez y de Óscar Aguilar González, director del Instituto Poblano de la Vivienda, de la administración marinista.

En breve entrevista el funcionario marinista señaló que el gobernador Mario Marín Torres aún no ha determinado quiénes ocuparan dichos cargos por el momento.

Montero Serrano indicó que será el gobernador Mario Marín Torres quien determine si son conducentes o no, más cambios en su administración.

Hay que recordar que Óscar Aguilar dejó el IPV tras asumir la presidencia de la Fundación Colosio del PRI estatal el pasado domingo. Sin embargo, se va en medio de un escándalo por fraude y deja pendiente la escrituración de la totalidad de las casas entregadas por el instituto desde 1998.

Aún fuera del Instituto Poblano de la Vivienda (IPV), Óscar Aguilar González continúa cometiendo fraudes con la venta y reventa ilegal de casas en el fraccionamiento Gobernadores, en donde diariamente son desalojados vecinos estafados por el hoy presidente de la Fundación Colosio.

El lunes pasado, una familia de la vivienda ubicada en la Manzana 11, lote 16 del bulevar Lombardo Toledano tuvo que dejar su domicilio, luego de que los legítimos propietarios del predio reclamaron su potestad. Uno de los afectados, quien pidió el anonimato por miedo a represalias, aseguró que el viernes pasado en el IPV les autorizaron ingresar a la vivienda, la cual comenzarían a pagar en breve.

En otro orden, Víctor Gabriel Chedraui, ex secretario de Fomento Económico del trienio dogerista fue nombrado ayer como nuevo director del Instituto para la Asistencia Pública del estado de Puebla (IAPEP), en sustitución de José Salvador Garmilla Herrera, quien ocupó dicho cargo durante nueve años.

El gobernador Mario Marín le tomó protesta ayer en Casa Aguayo al también ex aspirante a la candidatura a la presidencia municipal de Puebla. 

Los que hacen maletas…

Ahora que Blanca Laura Villeda deja el cargo como procuradora, los funcionarios que ella misma movió, alentó y protegió se encuentran tronándose los dedos debido a que es segura su remoción.

Aunque existe una versión periodística que indica que Villeda pidió a sus más cercanos colaboradores el seguirla hasta la ignominia, o sea, firmar su renuncia en desbandada ahora que abandona la silla de procuradora.

Como maneja el periodista Alfonso Ponce de León en su columna “Porque los muertos corren rápido” del diario Intolerancia, “la plana mayor” de la Procuraduría se prepara para los cambios. El periodista incluso apunta que del domingo 9 de marzo ocurrió una reunión de funcionarios de la PGJ para “revisar documentos”.

Entre los funcionarios que bien podrían ser rotados, cambiados o hasta cesados de la PGJ se encuentran los siguientes:

Hugo Isaac Arzola Muñoz

Director General de la Policía Judicial

Si bien no fue directamente apoyado por Villeda y llegó palomeado por el entonces presidente del Tribunal, Guillermo Pacheco, a Arzola se le ha cuestionados porque este 2008 sus agentes se encuentran “desatados”. El escándalo Ramírez puso una vez más en duda si Arzola ejerce el liderazgo que se necesita para ser jefe de los judiciales en el estado.

Rocío Montero Valencia

Directora de Averiguaciones Previas Zona Metropolitana Sur

Tras el escándalo del caso Ricardo Ramírez, empresario muerto en los separos de la PGJ, la directora Montero fue acusada por los propios judiciales, según denuncias anónimas enviadas en correos electrónicos, por orillarlos a usar la tortura debido a que las investigaciones en la dependencia se hacen “al vapor”. O sea, se detiene primero al sospecho y después se averigua a través de tortura, como ocurrió con el empresario Ricardo Ramírez.

Víctor Pérez Dorantes

Titular de la Dirección de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (Diedo)

Catalogado por muchos como uno de los consentidos de la llamada “Procuradora de Hierro”. Pérez Dorantes se queda desprotegido y sólo en una oficina que fue creada para él por la propia Villeda. La Diedo, ideada como copia de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada de la PGR, fue el método que Blanca Laura Villeda encontró para crear su propio grupo elite dentro de la PGJ. Curioso fue que la funcionaria encontrara recursos para crear oficinas propias para la dirección cuando constantemente se quejaba del poco presupuesto.

María del Carmen Castillo Directora de Conducta Individual

Señalada por varias investigaciones federales que tenían que ver con el narcotráfico en el norte del país, María del Carmen Castillo se guareció en su oficina de donde solamente salía para practicar pruebas antidoping de judiciales y trabajadores de la PGJ. Identificada como “comadre” de Villeda, Castillo queda también a merced del próximo procurador.