Seis meses después de la explosión en las instalaciones de Petróleos Mexicanos (Pemex) en la capital del país, donde murieron 37 personas, la paraestatal mantiene “en espera” la entrega de indemnizaciones a las familias de sus 30 trabajadores que murieron en el incidente.

La situación se debe a que la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje (JFCA) aún tiene que definir quiénes son los beneficiarios de los empleados fallecidos, indicó Pemex a CNNMéxico a finales de julio en respuesta a una solicitud de información.

“(La junta) debe determinar qué personas tienen derecho a dicha indemnización, por lo que Petróleos Mexicanos está en espera de que la JFCA determine a los beneficiarios”, señaló la paraestatal.

En la misma respuesta, Pemex detalló otros apoyos que ha entregado a los familiares de los trabajadores muertos.

Hasta la fecha, según la empresa, ha entregado a 28 familias un millón 55,897 pesos por concepto de prestaciones y 13 millones 707,145 pesos por seguro de vida. Los pagos que corresponden a los beneficiarios de los otros dos empleados “se encuentran en trámite”, agregó Pemex.

La explosión del 31 de enero en el edificio B2 de la Torre de Pemex, en el poniente de la Ciudad de México, ocurrió luego de que un “flamazo” prendió gases acumulados en los cimientos del inmueble, según informó este viernes la Procuraduría General de la República (PGR).

En el incidente murieron 37 personas —30 empleados de Pemex, una menor y seis trabajadores externos— y 126 resultaron heridas.

De acuerdo con la empresa, 77 de los lesionados fueron dados de alta durante las 24 horas siguientes al hecho y los 49 restantes permanecieron hospitalizados algunas semanas y aún asisten a “consultas externas de control y seguimiento” en áreas como traumatología, rehabilitación, neurocirugía y cirugía reconstructiva.

Tanto a los familiares de los fallecidos como a los heridos se les brindó atención psicológica, indicó Pemex.

Familiares de contratistas exigen apoyo

De los trabajadores externos fallecidos, tres laboraban para la empresa Copicosa, dedicada al mantenimiento de los pilotes que sostienen los edificios de la Torre de Pemex. Según el peritaje de la PGR, esos empleados se encontraban en la zona donde inició el estallido.

Familiares de esas víctimas —Luis Ojeda, Gregorio Vite y Enrique Hernández — dijeron que Pemex les brindó apoyo económico para los gastos funerarios y ayuda psicológica, pero no una indemnización porque la paraestatal argumentó que no le correspondía legalmente.

“Nos mandó decir Pemex que no pueden darnos más porque no tienen ellos responsabilidad para con mi hermano. (…) Habían dicho que se iban a tratar como si fueran petroleros, como si hubieran trabajado ahí ellos, cosa que no hicieron”, dijo a CNNMéxico María Luisa Ojeda, familiar de Luis Ojeda.

La mujer agregó que Copicosa entregó 144,000 pesos, pero la familia exige una indemnización mayor y analiza iniciar un juicio para reclamarla.

Carlos Alberto Álvarez, cuñado de Enrique Hernández, señaló en el mismo sentido que Pemex únicamente apoyó a sus familiares con gastos funerarios.

“Lo dijeron desde un principio. Pemex dijo que les iban a dar el apoyo y les iban a pagar una indemnización. Todas esas acciones no se han hecho”, dijo.

CNNMéxico buscó a funcionarios de la paraestatal para consultarles sobre la situación de los familiares de los contratistas fallecidos, pero no pudo contactarlos de forma inmediata.

El peritaje sobre la explosión de enero pasado se da a conocer a pocos días de que el presidente Enrique Peña Nieto presente al Congreso su iniciativa de reforma energética, que considera clave para su gobierno (2012-2018).

El mandatario ha señalado que su propuesta planteará cambios para hacer de Pemex una empresa más productiva, pero hasta ahora no ha detallado en qué consisten sus planes.

Fuente: CNN México