El secretario de Seguridad Pública estatal, Facundo Rosas Rosas, confirmó la veracidad de unas cartas que internos de diversos penales han enviado al gobierno a través de sus familiares en las que denuncian malos tratos por parte de custodios, además de cobro de cuotas por recibir visitas, por tener un dormitorio menos incómodo, para hacer uso de teléfonos celulares, entre otras irregularidades.
Debido a que en ellas implican a custodios y a funcionarios como el caso de la directora general de Centros de Reinserción Social del estado de Puebla, Lilia Verónica Cruz, así como el subdirector de Administración del penal, Gastón Santiago Arano Guerrero, el funcionario dio a conocer que Control Interno iniciará una investigación en torno a las quejas.
No obstante, dejó en claro que también serán escuchadas las versiones de los trabajadores, al considerar que los escritos están llenos de sentimentalismo, y a su parecer “cualquiera que es sometido a ciertas reglas, se termina quejándose.
”No olvidemos que lo que habla en estas cartas es la emoción, y no la cabeza fría, lo que nos permite buenas decisiones y resolver el problema. ¿Quién va a hablar bien de quien está en un régimen, como lo es el Centro de Reinserción Social?”, cuestionó.
Aclaró que a pesar de ello escuchará la versión de los reclusos de San Miguel que, según lo que se ha dado a conocer, son los que más se quejan, sin embargo también revisará la forma en la que están operando los trabajadores, tras recordar que una vez que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió recomendaciones en 2012, se dieron varios despidos, y que la gente que está trabajando "ha hecho todo lo posible en brindar un trato digno.
”Yo creo que hay que escucharlos, sí (a los reclusos) pero no sólo a ellos, sino a más voces”, señaló.
Comentó que en los escritos que han dado a conocer los familiares a los medios de comunicación, se mencionan nombres de algunas personas que ya no laboran en los penales.
Aseguró que buscará un punto que permita un equilibrio durante las indagaciones "para no tomar en cuenta sólo una voz, y menos de quien está recluso".
Dijo esperar a que se den los tiempos y se recolecten las versiones para que los resultados sean contundentes.
Juntas auxiliares, un problema interminable
En otro tema, Rosas Rosas admitió que en la capital las juntas auxiliares y unidades habitacionales siguen siendo un dolor de cabeza.
Aunque aseguró que se han logrado resultados a través del esquema de proximidad, principalmente en Ignacio Romero Vargas, reconoció que sigue habiendo conflictos.
"Estos lugares son motivo de preocupación, los lugares por narcomenudeo, seguimos tras pistas para evitar que se conviertan en problema mayor".
También dijo que buscan desarticular bandas en las zonas nocturnas.