En una frontera de más mil kilómetros de largo, un muro difícilmente representa una solución de seguridad. Menos cuando esa frontera divide a dos países amigos como México y Estados Unidos, aseguró el Presidente de Israel y Premio Nobel de la Paz, Shimon Peres en entrevista con REFORMA desde la Residencia Presidencial en Jerusalén.
"No estoy seguro (que funcione el muro), particularmente en esa frontera tan extensa. Aquí estamos hablando de fronteras de entre 100 y 150 kilómetros", dijo en contraste con el muro de hormigón erigido entre Israel y los territorios palestinos.
"Además Estados Unidos y México no son enemigos. Hay 12 millones de mexicanos en Estados Unidos, así que las fronteras y los puertos están abiertos", explicó.
El Premio Nobel de la Paz llega mañana a México en una visita oficial de seis días acompañado de una delegación compuesta por 80 compañías especializadas en el sector de la seguridad, cibernética, comunicaciones, UAV (aviones no tripulados), agua y energía.
El Mandatario mantendrá una reunión de trabajo con el Presidente Enrique Peña Nieto para discutir formas de fortalecer la cooperación entre los países, el proceso de paz en Medio Oriente y la presencia de Irán en América Latina.
Además, Peres emitirá un discurso ante el Senado de la República y mantendrá encuentros con empresarios, entre ellos Carlos Slim.