La moda de las ruedotas de la fortuna se extiende por el país. Ayer el periódico Reforma reveló que en Jalisco también se inaugurará una muy pronto, y junto con la de Puebla, serán las más grandes de América Latina. Sin embargo, ambos proyectos presentan grandes diferentes. Mientras que la de la entidad gobernada por Aristóteles Sandoval será financiada por una empresa privada, en nuestro estado se pagó con dinero del erario. La ruedota en Guadalajara mide 20 metros menos que la de Puebla, además tiene un costo significativamente menor, 140 contra 400 millones de pesos —a través de un proyecto de inversión que todavía se desconoce en cuánto tiempo se pagará.

La próxima rueda tapatía obtuvo todos los permisos necesarios ante Protección Civil y el Ayuntamiento para su instalación sin ninguna complicación, sin embargo para la de Puebla —cuya inversión fue de 200 millones de pesos, más 200 para la instalación del gobierno estatal— se iniciaron los trámites desde enero, cuando se proponía instalarla en el Paseo Bravo, cuyo gestión no fue lograda porque el INAH se opuso al proyecto.

En su segundo intento por ser situada dentro de las instalaciones del Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec el pasado abril, también fue bloqueada, pues la comunidad escolar se interpuso a su construcción.

Asimismo a finales de este mes fue acordado que estuviera en la zona de Angelópolis,sin embargo por su ubicación se tiene problemas limítrofes.

Ambas ruedas son itinerantes, sin embargo una recorrerá el interior de la república —DF y Monterrey— y la segunda sólo el del estado de Puebla.

La de Guadalajara mide 60 metros de altura y se ubica sobre la avenida Vallarta, a la altura de un centro comercial, por su parte la poblana tiene 80 metros de diámetro.