Friday, 29 de March de 2024


En peligro el cultivo de caña en Puebla




Escrito por  Gabriel Sánchez Andraca
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LA INDUSTRIA AZUCARERA mexicana está acusada por productores del dulce estadunidense de dumping, un delito económico que consiste en que un país actúa ventajosamente en el mercado internacional.

A México se le acusa de haber vendido el endulzante en Estados Unidos a un precio más bajo del que se le ha fijado internacionalmente, porque el gobierno mexicano subsidia a los productores de este país.

 

 

Tanto el gobierno mexicano como los industriales del ramo negaron tal cosa y afirmaron que el problema se deriva de que los 54 ingenios del país tuvieron una producción histórica de 61 millones de toneladas de caña molida, lo que provocó un incremento de las exportaciones para evitar que por la saturación del mercado interno, el precio del azúcar se desplomara causando un grave problema a los productores de caña y a los industriales.

 

 

LA ALTA PRODUCCIÓN, UN PROBLEMA: la elevada producción de caña constituye un problema para nuestro país, que no han sabido ni los gobiernos tecnocráticos priistas, ni en los dos gobiernos panistas, encontrarle salida.

 

 

Durante el gobierno de Vicente Fox se autorizó a las refresqueras la utilización de fructosa, en vez de azúcar, lo que pretendía equilibrar las exportaciones con las importaciones (México casi no produce fructosa) pero resultó contraproducente.

 

 

El gobierno de Felipe Calderón recibió una oferta para destinar gran parte de la zafra de caña para la producción de etanol, un combustible que tiene amplio mercado en China y otros países que no cuentan con petróleo, pero lo rechazó.

 

 

Ahora sólo queda reducir la producción del dulce, lo que provocaría un serio perjuicio no sólo para los industriales, sobre todo, para los campesinos que producen la materia prima que es la caña.

 

 

Puebla resultaría afectada seriamente, pues una amplia región del sur, de tierras fértiles con riego, como son los llanos que rodean a Izúcar de Matamoros, Chietla, Tepeojuma y otros municipios, tendrían que cambiar sus cultivos al ser ya incosteable la producción de caña.

 

 

El cambio de cultivos llevaría un mínimo de dos años, pero el problema es que los campesinos de la región han estado cultivando caña, obligatoriamente, desde los 30 del siglo XX. Cambiar cultivos no les será fácil y el gobierno tendría que invertir una fuerte cantidad de recursos para capacitar a los agricultores a fin de que se adaptaran a las circunstancias actuales.

 

 

Otra salida sería que se aceptara la propuesta que le hicieron a Calderón y que ya se estaba experimentando precisamente en Atencingo (Puebla tiene dos ingenios azucareros, el de dicha región y el de Calipan, en la región de Tehuacán) con buenos resultados.

 

 

Se aplicaba una técnica brasileña proporcionada por Cuba, incluso dirigentes de los campesinos cañeros de la CNC habían viajado a la isla para ver directamente cómo era la producción de etanol.

 

 

EL DEPARTAMENTO DE COMERCIO y la Comisión de Comercio Internacional de Estados Unidos (USITIC) decidieron iniciar la investigación correspondiente, pues el 28 de marzo los productores de azúcar del vecino país demandaron ante el gobierno estadunidense, aplicar cuotas compensatorias a México, por el supuesto dumping.

 

 

La USITIC deberá decidir antes del 12 de mayo si hay razones para considerar que las importaciones de azúcar mexicana perjudican a los productores de su país o constituyen una amenaza para su industria dulcera.

 

 

Ya el viernes pasado la USITIC celebró una primera audiencia en la que industriales y autoridades mexicanas negaron que las importaciones de azúcar de nuestro país hayan dañado intereses de la industria azucarera mexicana.

 

 

Es más, el gobierno mexicano dijo que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte creó un mercado de edulcorantes altamente integrado, en el que México exporta azúcar a Estados Unidos e importa fructuosa de la nación norteamericana.

 

 

México informó que está tomando medidas para exportar más de un millón de toneladas de azúcar a otros países para evitar afectaciones a los mercados de Norteamérica, lo cual fue reconocido recientemente por el secretario estadunidense de agricultura.

 

 

También dijo que “creó un programa de producción de etanol a base de caña de azúcar, con miras a desarrollar un mercado sustentable de biocombustibles, por medio del cual México consumirá sus excedentes de caña”.

 

 

Los azucareros gringos se alegraron de que las autoridades estadunidenses hayan decidido investigar su denuncia y esperan que se tomen las medidas correctivas lo más pronto posible.

 

 

LOS CAÑEROS DEBEN ESTAR preparados para lo peor, pues si en la zafra pasada tuvieron graves problemas económicos al grado de que el gobierno mexicano tuvo que subsidiarlos, ahora esos problemas pueden agravarse.

 

 

En la pasada zafra se dijo que el desplome en el precio del azúcar se debió a que Calderón importó 240 mil toneladas que desplomaron el precio de la caña, al grado de que los productores no sacaban ni el costo del cultivo. De ahí que el gobierno federal haya decidido el apoyo.

 

 

Las cosas no están tan fáciles, y ojalá eso de la producción de etanol sea serio y no una salida verbal de emergencia como se ha acostumbrado en la política mexicana.

 

 

 

LAS JUNTAS AUXILIARES ESTÁN EN CALMA después de que el Tribunal Electoral de la Federación echó atrás las convocatorias que se basaban en las reformas que autorizaban la participación abierta de los partidos políticos, ya que violaban el artículo 105 constitucional que establece que cualquier cambio electoral debe aplicarse 90 días después de su publicación y no antes, por lo que se paró la agitación que las convocatorias estaban provocando.

 

 

Aquí en el municipio de Puebla ya fueron registradas 87 planillas en las 17 juntas auxiliares. Fueron desechadas al no llenar los requisitos 28.

 

 

De entre las registradas habrán de elegirse las juntas que deberán gobernar a las 17 juntas auxiliares, el 27 de este mes, o sea, el próximo domingo.

 

 

Del interior del estado no se reportan problemas y todo parece indicar que los plebiscitos para la elección de las más de 600 juntas que existen en la entidad se realizarán en calma, salvo los tradicionales conflictos que se derivan del apasionamiento de los diferentes grupos que se disputan el poder.

 

 

 

 

 

 

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