Cerca de cinco horas fue lo que tardó la Secretaría General de Gobierno en enviar apoyo al municipio de Ajalpan para evitar el linchamiento de dos jóvenes encuestadores que fueron quemados vivos por los pobladores, pues fue el tiempo que transcurrió desde la llamada que realizó personalmente el edil, Gustavo Salomón Lara, al titular de la SGG, Jorge Cruz Bermúdez, para solicitar el apoyo.

Entrevistado vía telefónica en el programa #JuegoDeTroles, el presidente municipal de Ajalpan reveló que alrededor de las 6:30 de la tarde se comunicó personalmente con Jorge Cruz Bermúdez para solicitar refuerzos que dispersaran a la turba enardecida, sin embargo, el apoyo llegó hasta las 11:30 de la noche, cuando los jóvenes ya habían perdido la vida y la presidencia auxiliar había sido quemada.

Explicó que minutos antes de los violentos hechos, el edil salió a comer a una población que se encuentra a 10 minutos de su municipio, sin embargo, al recibir los reportes del linchamiento solicitó inmediatamente el apoyo a la SGG y a la subsecretaría de inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública que llegó cinco horas después y decidió no entrar al municipio por no recibir las instrucciones de sus superiores.

Salomón Lara reconoció que no ingresó inmediatamente a la cabecera municipal por el temor de ser linchado, al señalar que una turba enardecida de mil personas no la controla nadie.

Señaló que aunque fueron alrededor de mil los pobladores que escucharon las campanas para iniciar el linchamiento, sólo entre 80 y 100 vándalos fueron los que participaron en el brutal asesinato de los hermanos Rey David y José Abraham Copado Molina, quienes ya están identificados en las carpetas de investigación y son originarios de Ajalpan.

Sólo 50 policías en Ajalpan para detener linchamiento

El edil de Ajalpan reveló que su estado de fuerza es de apenas 50 elementos de la Policía municipal, de los cuales 35 participaron para intentar detener a la turba de pobladores que lincharon a los dos hermanos encuestadores, razón por la cual solicitó refuerzos al gobierno estatal.

Exhibió que los hechos ocurridos el pasado lunes eran una “bomba de tiempo”, debido a que en el municipio sólo existen 50 elementos para garantizar la seguridad de 60 mil pobladores, de los cuales 30 mil viven en la cabecera municipal y los 30 mil restantes al interior de la Sierra Negra.

Por ello, consideró que la intención de implementar el Mando Único en la entidad no resolverá los problemas de inseguridad que se vive al interior del estado, pues sale igual quien tenga el control de la policía sino se actúa de manera oportuna en casos de emergencia.