Dirigida por David Yates, la cinta no narra los orígenes de Tarzán sino que presenta al personaje de la selva ya civilizado y establecido en Londres junto a su esposa Jane, interpretado por la actriz Margot Robbie.
Tarzán termina regresando al Congo como emisario del Parlamento británico y tendrá que enfrentar un sinnúmero de aventuras.
“Es casi lo contrario del cuento clásico, donde se trata de dominar a la bestia”, dijo el actor en entrevista con USA Today. “Se trata de un hombre que se está conteniendo y poco a poco, cuando le quitas la máscara, vuelve a un estado más animal y permite que ese lado de su personalidad salga a flote”.
El film, a estrenarse en salas de cine el próximo 1 de julio, también cuenta con la participación de Djimon Hounsou, Samuel L. Jackson, George Washington y Christoph Waltz.