El director del departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana campus Puebla, Juan Luis Hernández Avendaño, se lanzó contra los diputados del PAN que impulsaron la Reforma Electoral que vuelve imposible la participación de candidatos independientes en procesos electorales, pues afirmó que hasta el fundador del partido albiazul, Manuel Gómez Morin, estaría avergonzado de que impidieron el acceso de los ciudadanos a la democracia. “Si Manuel Gómez Morin volviera a vivir y pudiera ver lo que hicieron sus discípulos en el Congreso, pues naturalmente se volvería a morir”, dijo.

En rueda de prensa, en la que las organizaciones sociales anunciaron la estrategia contra la reforma aprobada el sábado pasado, el académico sostuvo que los panistas traicionaron los valores y principios que por años enarboló Acción Nacional en favor de los ciudadanos.

“Fue un partido cuyos fundadores, cuyos candidatos a la presidencia de la República, al menos hasta 1988, fueron políticos y ciudadanos que en todo momento pusieron en el centro a los ciudadanos. Lo que el PAN ha hecho en el Congreso va en contra de todo lo defendieron durante décadas y no se entiende qué tipo de partido está en Puebla”, sentenció.

Por ello, sostuvo que el nuevo líder nacional del PAN, Ricardo Anaya Cortés, debe emitir una postura en torno a los candados aprobados en Puebla contra los independientes, sobre todo porque en campaña mantuvo un discurso pro-ciudadano.

“Mi pregunta va dirigida al nuevo presidente del Partido Acción Nacional: ¿para qué quería Ricardo Anaya ganar el PAN y su dirigencia, si su partido en Puebla está encabezando una de las medidas más retrogradas y primitivas que hay en el país? ¿Para qué quería ganar con un discurso pro-ciudadano si en Puebla se convierte en una legislación anticiudadanos?”.

Hernández Avendaño expuso que se demostró que los políticos tienen miedo a que ingresen los ciudadanos a los puestos de elección popular y descubran los negocios que han hecho a costa del erario.

“Los políticos se atrincheran en sus negocios que da la política. La participación de los ciudadanos parece atentar contra los negocios que se hacen al amparo de la oscuridad y de la política. Por eso no quieren que participemos, olfateemos, preguntemos y vayamos al Congreso y hagamos una propuesta”.