Más de 30 policías estatales resguardaron por varias horas el Ministerio Público de Tehuacán ante advertencias de familias de los ocho habitantes de Ajalpan que fueron detenidos en la madrugada de ayer, por su presunta participación en la tortura e incineración de los hermanos Rey David y José Abraham Copado Molina la noche del pasado 19 de octubre.

Los agentes arribaron a las inmediaciones del inmueble, luego de que un grupo de campesinos llegaran junto con abogados a exigir una explicación de dónde se habían llevado a sus seres queridos.

Sin embargo, ante la presencia de algunos medios regionales, los habitantes optaron por retirarse y convocar una rueda de prensa para este viernes, con el objetivo de denunciar presuntas anomalías en los arrestos, pues alegan que la Procuraduría General de Justicia (PGJ) está arrestando a “chivos expiatorios”.

Uno de los detenidos sufre epilepsia

En entrevista con el abogado de tres de los nuevos aprehendidos, Pastor Toscano Lozano, dio a conocer que uno de sus clientes –Juan T- sufre epilepsia, y pese a que los familiares alegaron que necesita estar medicado, los ministeriales no hicieron caso al sacarlo de su domicilio alrededor de las 4:00 de la madrugada de ayer.

Según dijo, los agentes no mostraron órdenes de aprehensión cuando arrestaron a los nuevos procesados.

Cabe señalar que el procurador Víctor Carrancá Bourget dio a conocer en una conferencia de prensa que de los ocho detenidos ayer, sólo en siete casos se ejecutaron órdenes de aprehensión ya que la otra persona está en calidad de presentado para deslindar su responsabilidad en el doble homicidio de los encuestadores.

Según el defensor jurídico, sus representados, Juan T, Orlando T, y Fermín T, no estaban en Ajalpan la noche del 19 de octubre cuando los hermanos Copado Molina fueron quemados vivos en la plaza principal por haber sido confundidos con secuestradores.