Lunes, 29 de Abril del 2024

Catorce padrecitos han fallecido por COVID-19; Puebla encabeza tragedia en la Arquidiócesis

Miércoles, 16 Diciembre 2020 01:25
Catorce padrecitos han fallecido por COVID-19; Puebla encabeza tragedia en la Arquidiócesis

José Guadalupe Sanguino Fuentes y Valentín Ramírez Tlahque fueron los primeros de la Arquidiócesis de Puebla que perdieron la batalla contra el virus, en abril pasado

Fernanda Escobedo

@mf_escobedo



 


Con un total de 14 sacerdotes muertos, la Arquidiócesis de Puebla se ubica en primer lugar nacional por el número de religiosos fallecidos a causa del COVID, mientras que en el segundo sitio se encuentran cuatro entidades, pero únicamente con cinco casos cada una, según refiere el duodécimo estudio del Centro Católico Multimedial (CCM).


Con corte al 20 de noviembre del año en curso, la Arquidiócesis de Puebla se ha mantenido desde junio encabezando la lista de clérigos fallecidos por el virus, el último deceso fue el del sacerdote Felipe Manuel Alonso Valdés de 64 años de edad.


Las arquidiócesis que se encuentran en segundo lugar, con nueve decesos menos que Puebla, son la de la Ciudad de México, Morelia, San Luis Potosí y Toluca, el tercer lugar es ocupado por la Arquidiócesis de Tlalnepantla con cuatro muertes.


El reporte del CCM revela que en todo el país se contabilizó el deceso de un obispo, 109 sacerdotes, ocho diáconos y cinco religiosas, sumando un total de 123 miembros de la grey católica a nivel nacional, luego de que en el mes de junio se declarara a nivel nacional el inicio de la Nueva Normalidad, aunque en la entidad poblana el gobernador Miguel Barbosa declaró esta etapa el 7 de agosto.


Presbíteros como José Guadalupe Sanguino Fuentes y Valentín Ramírez Tlahque fueron los primeros de la Arquidiócesis de Puebla que perdieron la batalla contra el virus el pasado 15 de abril del año en curso, provocando la conmoción de los fieles católicos ante la noticia. Luego, un mes después se dio a conocer el deceso del sacerdote Álvaro Ramírez Hernández.


La lista incrementó y en el mes de junio ocurrieron cuatro decesos más y posteriormente fue ocurriendo uno por mes hasta noviembre, con el sacerdote Felipe Manuel Alonso Valdés, además de que cabe mencionar que la mayoría de los presbíteros fallecidos contaban desde los 50 hasta los 95 años de edad.