Orlando Rincón, defensor universitario de Lobos BUAP, afirmó que los 13 refuerzos en el plantel propiciarán a una competencia sana pero reñida, donde sólo los mejores tendrán un lugar indiscutible como titular.

A cinco días de pretemporada en Acapulco, el plantel universitario ha trabajado a tope en sus prácticas, esto con la integración de los refuerzos junto a lo que quedó del plantel que llevó al Ascenso a los licántropos.

Debido a la integración de ambos grupos, Orlando Rincón, defensor universitario que desde el 2015 juega para los poblanos, aseveró que sus compañeros gozan de un excelente trabajo en equipo ya que llegan propositivos y con la meta de mejorar día con día.

“Tienen mucha disposición, sabemos que vienen de equipos muy importantes, vienen a sumar y a conformar un buen equipo”, aseguró el elemento nacido en Cuautla de Morelos.

A sabiendas que ahora Lobos tiene jugadores con gran trayectoria, Orlando mencionó que la lucha por ser titular será intensa, ya que convencer a su entrenador será indiscutible, aunque espera una buena competencia interna en Ciudad Universitaria.

“Sabemos que por posición tenemos a dos o tres compañeros, el que esté en mejor momento va a jugar, el director técnico, decidirá quién está en un mejor momento, eso es importante que tengamos una muy buena competencia interna”, agregó.

La base será la misma, pese a los refuerzos

Rincón afirmó que esperan con entusiasmo comenzar el torneo el siguiente 21 de julio para apuntalar su presencia en Primera División, y si bien han llegado nuevos jugadores al equipo, señaló que la base será la misma.

“Va a ser la misma idea que veníamos trabajando en el Ascenso, sabemos que es totalmente diferente, pero es la misma base, prácticamente se sumaron la mitad del equipo, tenemos la ilusión de que empiece esto y obviamente de permanecer mucho tiempo en la Liga MX”.

Ilusionado por su regreso a Primera

A su vez, el zaguero que alguna vez pasó por Puebla, Jaguares y Atlante, añadió que tiene el hambre de regresar al máximo circuito, sin dejar de lado el objetivo común que tiene con su equipo, que es el de salvarse por no descender el siguiente verano.

“Es un reto muy importante, sabemos que es muy complicado estar en primera división, en mi caso me ha tocado y después de varios años regreso, tenemos mucha hambre, sed de regresar al máximo circuito y como te digo tratar de que Lobos se mantenga el más tiempo posible”, aseguró.