El mismo argumento ha tenido un amplio eco en Puebla. ‘El costo del combustible robado ha aumentado 60 % por combate a los huachicoleros’, se ha afirmado.

 

La pregunta central es: ¿Realmente se está ganando la guerra a la industria criminal del huachicol?

 

En esta entrega de Cúpula nos permitiremos sostener el porqué de la siguiente respuesta: ni remotamente se está ganando la guerra.

 

Luego de las imágenes de un soldado disparando a un criminal tirado en el piso, se hizo urgente la rotación de una institución por otra. La Secretaría de la Defensa Nacional se replegó y la Marina Armada tomó el control del cerco al Triángulo Rojo. Mucho más eficiente, rigurosa y profesional la SEMAR logró controlar el flujo, el tráfico y trasiego de los huachicoleros.

 

Sin embargo, esto debe verse como el oficial que está cuidando la puerta de un banco. Pero en cuanto de la media vuelta, los criminales se volverán a meter a todas las cajas.

 

Las preguntas que se hacen forzosas son las siguientes y nos permitimos enumerarlas:

 

1. ¿Se ha detenido a las verdaderas cabezas de esta industria criminal, es decir, cómo va la cacería sobre ‘El Bukanas’, ‘El Toñín’, ‘El Ruso’ y ‘El Vieja’ además de la legendaria ‘Negra’?

 

2. ¿Se han procesado a los grandes compradores de huachicol, es decir a aquellos que adquieren decenas de camiones diarios para uso industrial?

 

3. Salvo el caso del ex presidente  municipal de Atzitzintla ¿Cuáles otros alcaldes serán verdaderamente sometidos a proceso penal por su responsabilidad en la protección a redes de huachicoleros?

 

Ahí tenemos los casos impunes de los ediles Pablo Morales Ugalde de Palmar de Bravo e Inés Saturnino de Tecamachalco quienes pese a señalamientos —incluso oficiales—, permanecen bajo un completo manto de impunidad.

 

4. ¿Se están creando fuentes de empleo en los municipios del Triángulo Rojo? ¿Se construyen las condiciones para abatir la pobreza flagelante de esas comunidades y así evitar que se conviertan en aliados del crimen organizado?

 

5. ¿Se están fortaleciendo a las policías municipales de Palmar de Bravo, Tecamachalco, Palmarito, Acatzingo, entre otras? ¿Se les está capacitando con cursos especializados? ¿Se les está dotando del armamento y los recursos técnicos necesarios?

 

6. ¿Cómo va la famosa estrategia colombiana que Carlos Loret presentó en su columna y que hablaba sobre aplicar medidas y estrategias del país sudamericano? ¿Ya comenzaron a implementarlas?

 

7. ¿Cuántas auditorías ha aplicado el Sistema de Administración Tributaria (SAT) a empresas gasolineras sospechosas de comerciar el huachicol?

 

Apreciado y generoso lector, las respuestas a estas preguntas usted las sabe. Estamos ante una enorme pantomima, ante una gigantesca parodia.

 

La Marina Armada está haciendo el mismo papel de aquella vieja ilustración en la que un hombre pone el dedo índice en el hoyo de una presa que está a punto de reventar.

 

La presa del huachicol poblano sólo se está conteniendo. Al tiempo.

 

 

Como siempre quedo a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., sin mx.