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Martes, 28 Marzo 2017 02:38

La Guerra vs el Huachicol: escenas de Black Hawk Down

La Guerra vs el Huachicol: escenas de Black Hawk Down Escrito Por :   Arturo Rueda

Porque el control de precios del combustible llegó a su fin y ya hay un calendario para su liberalización. Para el 1 de enero del 2018, el gobierno ya no fijará los precios, sino el libre juego de las fuerzas del mercado. Entonces, el precio por litro podrá dispararse desde 18 hasta 20 pesos, con lo que nuevamente será redituable acudir al mercado libre del huachicol


Militares caídos, desperdigados en un campo polvoriento, muchos de ellos sin capacidad para levantarse, otros ayudando a sus compañeros, todos mientras un helicóptero desciende en medio de la polvareda para resguardar al convoy fallido. No se trata de Afganistán ni Irak. Tampoco una escena de la película Black Hawk Down del director Ridley Scott.

 

Mucho menos de Tamaulipas o Sinaloa en plena guerra contra el narco. Es Puebla, Palmar de Bravo, a menos de hora y media de la capital, donde ya se vive una guerra civil, la guerra del huachicol.

 

El despliegue de 500 militares en la zona del Triángulo Rojo, primera respuesta contundente del gobierno de Gali Fayad al desafío de los cárteles que controlan el robo de hidrocarburo ha provocado un primer efecto económico: elevar el precio del litro de combustible hurtado, de 8 a 10 pesos, y por tanto, los costos sociales del fenómeno delictivo.

 

Este primer efecto económico, a diferencia de la guerra contra las drogas, puede ser el primer paso para frenar transitoriamente el fenómeno delictivo más importante que ha conocido Puebla. Subrayo la palabra transitorio. ¿Por qué?

 

Porque en este momento, a diferencia de las drogas como la marihuana, cocaína y heroína, el costo de la gasolina tiene un precio oficial controlado por el Estado, y mientras más se acerque el costo por litro del huachicol al costo del litro en gasolineras menos incentivos tendrán los consumidores. Es decir, si en los expendios el precio por litro es de 15.63 y en el mercado negro del huachicol a 10 pesos, el beneficio económico de la ilegalidad ya no es del 50 %, sino del 30 %.

 

¿Vale la pena jugársela sólo por un beneficio del 30 %? Muchos pensarán que no, ya que si además de los costos de transportación le sumamos los riesgos legales. Por ejemplo, un #UberHuachicol que lo trae a Puebla capital, para tener ganancias, tendría que darlo a 11 o 12 pesos, por lo que el incentivo perverso prácticamente desaparece. El consumo ordinario estaría ganado apenas unos tres o cuatro pesos por litro con el riesgo de descomponer la bomba de gasolina. Ya no es negocio.

 

La guerra contra las drogas es interminable precisamente porque no hay precio controlado por el Estado, y todo se reduce a la fuerza del mercado. A más demanda, el precio puede elevarse al infinito. El problema de las drogas es logístico como demostró Roberto Saviano en su magnífico libro Cero Cero Cero, ya que un costo tiene la cocaína en Colombia y otro en Estados Unidos.

 

Pero esta intervención del Ejército es un alivio temporal, un ‘mejoralito’. ¿Por qué? Porque el control de precios del combustible llegó a su fin y ya hay un calendario para su liberalización. Para el 1 de enero del 2018, el gobierno ya no fijará los precios, sino el libre juego de las fuerzas del mercado. Entonces, el precio por litro podrá dispararse desde 18 hasta 20 pesos, con lo que nuevamente será redituable acudir al mercado libre del huachicol.

 

Pero el impresionante despliegue del Ejército no ha asustado a las mafias de chupaductos que antier enfrentaron a un convoy y dejaron 9 militares lesionados en las escenas que relaté al principio de esta columna.

 

La crónica de los reporteros de CAMBIO regionales es contundente:

 

“Aproximadamente las 13:10 horas cuando los militares circulaban sobre la carretera vecinal que conecta a las comunidades Encrucijada y Cuesta Blanca, al llegar a la altura del paraje denominado ‘Los Limones’ interceptaron una camioneta Chevrolet Silverado con placas de circulación HF-27270 del estado de Guerrero, la cual trasportaba cuatro tambos con capacidad de 200 litros, tres abastecidos de gasolina robada a ductos de Pemex.

 

“Cuando los uniformados ordenaron al conductor que se detuviera, los ocupantes de la camioneta intentaron escapar entre terrenos de siembra con dirección a la Autopista Puebla-Orizaba.

 

“Alrededor de 20 minutos después, hombres armados a bordo de una camioneta Lincoln color negro con engomado YKF-4706 del estado de Veracruz y una camioneta Faw de color gris, abrieron fuego contra los militares que viajaban a bordo de un camión Dina perteneciente a las Fuerzas Armadas.

 

“Durante el enfrentamiento los hampones utilizaron las unidades, volcaron el camión y luego escaparon con rumbo desconocido. El saldo fue de nueve militares lesionados; dos fueron trasladados en helicóptero de la policía federal a la capital poblana y los otros siete, llevados en una ambulancia militar al nosocomio en el municipio Esperanza”.

 

Así está la Guerra del Huachicol.

 

La Guerra que nos heredó Moreno Valle.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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