Golpeada en brazos y piernas, así quedó Lizeth González Solís. Ella no fue víctima de la delincuencia, ella fue atacada por elementos de la Policía Municipal de Teziutlán, que además, la extorsionaron. La mujer acusa que fue detenida por los uniformados por manejar en estado de ebriedad pero la medida con la que fue sometida, considera, fue extrema.

El pasado sábado, ella y un hombre viajaban alcoholizados con un menor de edad, al ser detenidos en el centro de esta población fueron golpeados por elementos de la policía, luego encarcelados y les exigieron cinco mil pesos para dejarlos en libertad.

La afectada, Lizeth González denuncio públicamente este abuso policial y explicó que a ella la dejaron libre para que fuera a conseguir el dinero y que sus acompañantes quedaran en libertad.

Ella fue golpeada en el brazo derecho y tiene lesiones en diversas partes del cuerpo, mientras que su hermano de 26 años de edad, recibió un golpe en la boca con la cacha de un arma larga de fuego, por lo que le rompieron el labio y le tiraron un diente. Además de que les aplicaron descargas eléctricas durante la detección. 

Tras esta denuncia el gobierno del priista, Arturo Córdova Ruiz, no ha dado postura alguna aunque funcionarios del Ayuntamiento han estado justificando el abuso policiaco que aplicaron en la detención de estas personas, ya que a través de las redes sociales, argumentan que la mujer agredió física y verbalmente a la policía.

La denunciante afirma que la policía los despojó de dinero y de sus celulares. La víctima reconoce que conducía en estado de ebriedad, pero que no era necesario utilizar tanta violencia y abuso de autoridad y menos, contra una mujer.

La víctima afirma que acudirá ante el presidente municipal para exponer esta situación y si no hay alguna reparación del daño, interpondrá una denuncia ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos.