Un posible ajuste de cuentas por tráfico de gasolina es el móvil del atentado que sufrieron tres integrantes de una familia –la mamá y sus dos hijos– la noche de este martes en la comunidad Guadalupe Piletas, en el municipio de Esperanza.
Se trata de María Eugenia de 49 años de edad, y sus hijos Cristian de 30 y Carlos Alfredo de 21.
Trascendió que uno de jóvenes lesionados se dedicaba al huachicol, sin embargo con la militarización del poliducto Minatitlán- México se quedó sin ‘oficio’.
De acuerdo con las investigaciones de las autoridades, el otro joven acribillado laboraba en una empresa de fertilizantes, y la madre de ambos se dedica a las labores del hogar.
Fuentes consultadas informaron que eran aproximadamente 21:00 horas del martes, cuando las tres personas se encontraban frente a su domicilio en la localidad de Puente Negro, cuando sujetos a bordo de un vehículo con características desconocidas, abrieron fuego contra los tres.
Los agresores se dieron a la fuga a exceso de velocidad en las calles de la localidad, vecinos llamaron al 911 donde informaron que la mujer y sus hijos estaban inconscientes y perdían mucha sangre a consecuencia de las lesiones producidas por los impactos de balas.
Los lesionados fueron trasladados al CESSA de Esperanza y más tarde llevados al Hospital General de Tecamachalco, donde su estado de salud es reportado como delicado.