Reconoce Arredondo corrupción en SCT

Su comparecencia estuvo enmarcada por una manifestación de transportistas que exigen la modificación del artículo 86

El secretario de Salud del estado, Roberto Morales Flores reiteró que su dependencia no construye hospitales, con lo que se deslindó del atraso en las obras del Hospital de la Zona Norte de la capital poblana y por su inauguración sin que se haya terminado

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Efraín Núñez Calderón / Selene Ríos Andraca

Rómulo Arredondo Gutiérrez, secretario de Comunicaciones y Transportes (SCT) reconoció la existencia de corrupción en su dependencia al señalar que el año pasado 13 delegados fueron relevados de su cargo por sospechas de acto irregulares y empleados del área de Atención han causado baja por diversas anomalías. El titular de la SCT aceptó que los señalamientos de actos irregulares en su dependencia han sido una constante.

El funcionario aseguró que permanecerá como titular de la dependencia hasta que así lo considere el gobernador Mario Marín. Lo anterior al ser cuestionado sobre su posible llegada a la dirección de Carreteras de Cuota Puebla (CCP), como trascendió en diversos espacios periodísticos.

En su intervención, la diputada local del PAN Leonor Popócatl cuestionó al funcionario sobre los beneficios que desde la SCT se han dado a los dueños de monopolios de transporte público y le advirtió que cuenta con las pruebas necesarias para asegurar que desde la Sedecap se han hecho un sinnúmero de observaciones por irregularidades en el trabajo de la secretaría. Asimismo, reveló que la SCT federal le ha señalado a la dependencia estatal que incumple con la ley al permitir que rutas del transporte público circulen por vías federales.

Rómulo Arredondo, aseguró que hasta la fecha no existen procedimientos administrativos en la Contraloría estatal por actos de corrupción, ni hubo señalamientos que pudieran legitimarse a través de una denuncia, sin embargo, dijo:

“Fueron 13 las delegaciones que fueron relevadas, por sospechas. Quiero resaltar que no hubo denuncia al respecto. Sí hubo sospechas en este sentido. Se hicieron también algunas bajas al interior de la dependencia, básicamente en el área de atención al público.”

La bancada del PAN desmintió al funcionario al evidenciar que la Contraloría determinó cinco observaciones en contra de la SCT respecto a la adjudicación para reconstruir el camino Izúcar de Matamoros-Atencingo, obra a cargo de la empresa Construcción, Desarrollo e Ingeniería Gomza SA de CV, más aún, la legisladora evidenció que los delegados de la dependencia continúan extorsionando a los transportistas.

Durante toda su comparecencia el funcionario trató de defender a los concesionarios del transporte público al señalar que las reformas al artículo 86 del Código de Defensa Social —en el que se estipula que no alcanzan fianza los transportistas que se vean inmiscuidos en un delito culposo— no resuelve el problema de los accidentes.

Incluso llegó a señalar que estás reglas tendrían que aplicar para todo tipo de automovilistas y no sólo para los conductores del transporte público. Por último, aseguró que la decisión final la tienen los diputados.  

Al tiempo que Arredondo realizaba esta defensa, un grupo de transportistas afiliados a la Alianza de Operadores Especializados 9 de enero, encabezados por su líder Melitón Cabañas Aquino, se manifestaba a las afueras del recinto legislativo, exigiendo a los diputados que echen abajo las reformas al 86, debido a que éstas dañan a los familiares de los conductores involucrados en un accidente.

Pese a las continuas críticas respecto al servicio que presta el transporte público, el funcionario externó su preferencia por los concesionarios al manifestar que Puebla ocupa el séptimo lugar nacional en calidad de este servicio, por lo que aseguró que se ha visto el esfuerzo de los transportistas.

No hay culpables por
tragedia en Eloxochitlán

En otro orden, Rómulo Arredondo confirmó que ninguna dependencia de la administración marinista comenzó un procedimiento de determinación de responsabilidades por las anomalías registradas en diversos tramos de la carretera Azumbilla-Tlacotepec de Díaz, carretera en la que se registró el desgajamiento de un cerro que mató a 32 personas en julio de 2007.

A pesar del mal estado del tramo en el que se registró la tragedia —construido por la empresa DAP—, así como las irregularidades encontradas en la construcción de la empresa Esna, de Édgar Nava, la dependencia estatal resolvió que el accidente se debió a una cuestión de la naturaleza.

Es decir, se pasaron por alto las anomalías y ahora la SCT reconstruye la vialidad con un nuevo trazo, trabajos que tienen un costo superior a los 44 millones de pesos.