Los gobiernos del Estado de México y del Distrito Federal han entrado en una serie de dimes y diretes por el hallazgo de una maleta en la estación San Antonio del Metro con el cadáver de una mujer decapitada.
Y es que la administración mexiquense repugnó la declaración que hizo el mandatario capitalino, Miguel Ángel Mancera, quien dijo que el crimen se pudo cometer en el Edomex y los asesinos sólo dejaron el cuerpo en la mencionada estación de la Línea 7.
Ayer, el presidente de la Junta de Coordinación Política de la Legislatura mexiquense, Aarón Urbina Bedolla, hizo un llamado a las autoridades capitalinas a que asuman su responsabilidad en cuando a la delincuencia y no repartan culpas.
"Si no pueden que no repartan culpas. Más que repartir culpas hay que repartir y asumir responsabilidades. Tenemos en el Estado de México cientos de delincuentes que vienen del DF y no por ello los responsabilizamos a ellos", dijo Urbina Bedolla, diputado del PRI.
El caso ha ido arrojando nuevos datos: La mujer, de quien hasta ayer ninguna autoridad había informado respecto a su identidad tenía dos cicatrices de cirugías estéticas.
Según los primeros peritajes de la Procuraduría General de Justicia del DF, la víctima al parecer se sometió a una liposucción o le extrajeron algunas costillas.
Se estableció en la indagatoria que la mujer, de aproximadamente 30 años de edad, presuntamente se hizo pedicure antes de ser asesinada, pues tenía recortadas las uñas de sus pies y los talones fueron limados.
De acuerdo con el estudio, la joven tenía la piel de todo su cuerpo bien cuidada, similar al de una mujer que utiliza tratamientos de belleza.
La Policía de Investigación plantea que la víctima se dedicaba a bailar en centros nocturnos o fue pareja de algún delincuente con alto poder adquisitivo.
No obstante, se estudian otras líneas de investigación.
Sin datos
La mujer decapitada fue hallada desde el sábado pasado a las 23:50 horas del sábado en una escalinata de los andenes de la estación San Antonio y hasta ahora, el área de Comunicación Social de la Procuraduría capitalina señaló que todavía no tienen datos de ella.
El cadáver fue hallado dentro de una maleta, color azul marino con ruedas, en la que la trasladaron a lo largo de 11 estaciones de la Línea 7, al parecer desde El Rosario hasta San Antonio.
Y según los exámenes realizados por médicos legistas, la persona que trasladó el cadáver lo roció con tres frascos de aromatizante para inhibir el olor putrefacto. De acuerdo con los reportes, la mujer tenía al menos dos días que había sido asesinada.
La identificación se ha dificultado toda vez que el cadáver fue localizado decapitado y sin manos, por lo que no hay huellas dactilares.
Según la averiguación previa FBJ/BJ-1/T3/02972/13-12, las autoridades tienen imágenes del hombre que prestamente trasladó la maleta desde la estación Rosario.
