Ante el colapso el sábado pasado de un puente en San Miguel Espejo que provocó la caída de un automóvil, que ha puesto a los pobladores en peligro, ayer alrededor de 300 habitantes de la ex Hacienda Capulac bloquearon la caseta de cobro de la autopista Puebla-Amozoc por más de cuatro horas, para exigir que el gobierno estatal reconstruya el acceso a la comunidad.

A las 9 de la mañana los quejosos arribaron a la autopista con la intención de evitar el paso de automovilistas, por lo que al mediodía acudieron 70 granaderos de la Policía estatal para retirar a los manifestantes.

Pese a que llegó personal de Gobernación a dialogar, los lugareños no quedaban conformes, sin embargo, ante su negativa se decidió remover bloques de concreto del muro de contención para habilitar el carril del sentido contrario y así evitar el tráfico.

El conflicto terminó cuando el representante de los pobladores, Raúl Flores, aceptó dialogar con la Secretaría de Infraestructura para detallar la reconstrucción del puente, aunque se desconoce cuándo iniciarán las obras.

Ante el diálogo, los granaderos se retiraron del lugar sin confrontarse contra los manifestantes.

El lunes pasado CAMBIO dio a conocer del accidente que sufrió un automovilista, quien no se percato a tiempo del hoyo, por lo que su automóvil cayó de una altura de 30 metros. Sin embargo, no hubo lesionados.

Según los quejosos, el “puente maldito” colapsó los primeros días de septiembre debido a las intensas lluvias que han azotado el estado.