Aunque por más de 40 años, los presidentes municipales de 13 distintas administraciones prometieron la certificación Tipo Inspección Federal (TIF), fue en la actual administración municipal de Eduardo Rivera cuando el municipio obtuvo la certificación federal, hecho que el alcalde festejo con comida y mariachi.

El costo del proyecto se acercó a los 40 millones de pesos y, aunque se entregó con un par de meses de retraso según lo previsto por el Ayuntamiento, el edil celebró el primer rastro TIF de la línea de porcinos que permitirá el sacrificio de mil a dos mil cerdos con calidad de exportación.

La certificación fue entregada por el representante del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica),  Hugo Fragoso Sánchez, quien lo nombro el rastro 591 del país.

Rivera Pérez reconoció el trabajo del director de Industrial de Abasto, Alejandro Landero León, y de su equipo de trabajo por este logro, a quienes festejo a lo grande con carnitas y mariachi, con el que el alcalde aprovecho para cantar un ‘palomazo’ a petición de los presentes.