Friday, 26 de April de 2024


Fernando Rosales Solís y la migración criminal




Escrito por  Javier Arellano Ramírez
foto autor
El efecto fue verdaderamente impactante.

Fue más allá de la publicidad contratada en espacios nacionales.

 

 

Sólo bastaron siete minutos.

 

 

Fueron escasos minutos del programa de televisión “Punto de Partida” que conduce Denise Maerker para demostrar el aparato antisecuestros que tiene el estado de Puebla.

 

 

Una breve entrevista a Fernando Rosales Solís, titular de la Dirección General de Atención a Delitos de Alto Impacto, DGADAI, bastó para demostrar el nivel, la capacidad y operatividad de esa dependencia.

 

 

La noche del martes primero, el noticiero de Maerker abordó durante unos minutos el aparato antisecuestros poblano.

 

 

La más avanzada tecnología policial en una unidad móvil que videograba, escucha y  monitorea casas de seguridad de secuestradores para enviar toda la información directamente a las oficinas centrales de la DGADAI, donde los datos se evalúan por un grupo táctico que establece las posibilidades de rescate.

 

 

Un centro de información que diariamente evalúa todo tipo de reportes y datos que puedan coadyuvar a la identificación de grupos criminales, en especial secuestradores.

 

 

Y aunque las cifras de las bandas de plagiarios desarticuladas en Puebla son muy favorables, el mismo Fernando Rosales Solís reconoce lo que hemos apuntado en esta “Cúpula”, que las secuelas de la migración criminal, el comúnmente conocido “efecto cucaracha”, es el que le está pegando duramente a Puebla.

 

 

Los estados vecinos son precisamente aquellos con mayores índices de plagios en toda la República. Estado de México, Guerrero, Morelos y Veracruz acumulan, entre los cuatro, más del 70 por ciento de los secuestros que se cometen en el país.

 

 

Fue por ello que en esta “Cúpula” destacamos la delicada omisión de Monte Alejandro Rubido cuando anticipó una feroz ofensiva en el Estado de México, pero nunca mencionó a Puebla.

 

 

Si el aparato federal lanza toda su fuerza en la tierra de Peña Nieto la migración criminal, el “efecto cucaracha” será enorme. Y una parte de esa estampida vendrá inexorable, irremediablemente a Puebla.

 

 

El grupo de Rosales Solís lo sabe. Y está preparado para ello, como demostró en el programa de Denise Maerker al presentar un aspecto de la procuración de justicia a la que ningún medio local tuvo acceso.

 

 

La política y el ejercicio de la prostitución

 

 

En el Distrito Federal se desató un descomunal escándalo.

 

 

El presidente del tricolor en la capital del país Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre fue exhibido en el noticiero de Carmen Aristegui por tener a su servicio una red de prostitución que precisamente se ejerce dentro de las oficinas de ese instituto político.

 

 

La nota se ha vuelto escandalosa, pero en la realidad, en los hechos, en la práctica la política siempre ha ido de la mano de la prostitución.

 

 

En Puebla son varias las señoras que han hecho carrera política gracias a los servicios sexuales que en otras décadas prestaron al gobernador en turno, al  jefe del partido, al secretario de Gobernación.

 

 

Puebla es una ciudad en la que todos los agentes políticos se conocen. Se sabe perfectamente quiénes son las señoras que escalaron posiciones gracias a que se prestaron a esas prácticas. Que nadie se espante.

 

 

Así llegaron a ocupar destacados cargos políticos, haciendo antesalas en los pasillos con la firme intención de prestarse a lo que fuera.

 

 

Y ahora hasta quieren más.

 

 

Como siempre estamos a sus órdenes en cupula99@yahoo.com, sin mx.

 

 

 

 

 

Valora este artículo
(0 votos)
comments powered by Disqus