Twitter es una arena fértil para batallas políticas, un mecanismo para ejercer presión social en asuntos públicos, pero también se aprovecha para difundir información falsa y emprender guerras sucias. Las elecciones locales en el Estado de México durante 2011 y las presidenciales en 2012, dejaron al descubierto la producción de simulacros en twitter. Las elecciones 2015 también evidencian la falta de capacidad de candidatos y la poca creatividad de sus asesores.
¿Cómo se observa la producción de simulacros políticos en Twitter?. La investigadora sobre Social Media, del Tecnológico de Monterrey, Paola Ricaurte identifica dos estrategias principales: los acarreados digitales (bots y no bots) y la producción artificial de Trendings Topics.
Simulacro 1.
Pesudoseguidores o acarreados digitales. Creencia de que el número de seguidores equivale al grado de aceptación social. En los equipos de campaña queda claro como opera el simulacro y su clasificación (Ricaurte, 2011):
a) acarreados fantasmas (cuentas vacías),
b) bots (programados para tuitear),
c) acarreados activos (pagados para tuitear).
Un bot (derivado de la palabra Robot) es una cuenta ficticia, activa, encadenada a una herramienta de administración de cuentas de Twitter que se utiliza para retuitear (RT), seguir otras cuentas (Follow) o generar tendencias (TT). El mensaje se repite en diversas cuentas interconectadas, lo que permite que la conversación crezca, el algoritmo detecte la tendencia y se convierta en Trending Topic por algunas horas.
Un Follower falso es un tipo de cuenta inactiva o activa, muchas de las veces con IP poco detectable o ubicada en otro país que se agrega a los followers del candidato al que se apoya, o bien, sirve para atacar una cuenta específica en las estrategias de guerra sucia en la red. Estos se pueden comprar desde un precio de cinco dólares. La ausencia de reacción o conversación tiende a desplomar el engagment, indispensable para lograr un nivel de confianza aceptable.
Simulacro 2.
El pseudoacontecimiento o la fábrica de Trending Topics se asocia al primero con la producción de hashtags de apoyo al candidato y operación de bots para generar tendencias. Los trendings topics son un mecanismo de establecimiento de la agenda en twitter. Al “destacarse” un tópico en la escena virtual, se hace visible y se convierte en parte del imaginario colectivo. El Hashtag se convierte en una construcción artificial de la agenda pública, retomada por la agenda mediática.
Simulacro 3
En las actuales contiendas electorales en México se agrega otro tipo de simulacro en Twitter: la guerra sucia. Desde el inicio de la campaña se instala un ejército de bots que atacan o defienden a ciertos candidatos. Bajo algún tipo de #Hashtag se construye una batería de tuis que pretenden viralizar y convertirlo en TT. En realidad esta estrategia sólo logra distraer a los candidatos de su campaña offline para concentrarse en defender su presencia online.
En la actualidad es muy fácil identificar a los bots y a este tipo de simulacros: red de seguimiento, intensidad de publicación, coherencia en el perfil, información biográfica del perfil, avatar y el mapeo de propiedades. En este caso mediante herramientas de Social Graph se puede identificar si tiene presencia en la red. O bien, el MentionMap permite ver la interacción con otras cuentas, probablemente con otros bots y hashtags que atacan o defienden.
Tiwitter se ha convertido en el nuevo espacio público para la deliberación y la confrontación de las ideas. Pero también es es la nueva escena virtual para el descrédito y el señalamiento público. Un lugar donde no hay reglas estrictas en la guerra por el poder; donde la opinión, la crítica, la inmediatez, la confirmación del dato, no tienen mediación y validación.
¿Qué puede hacer un candidato para detenter o defenderse ante la ola de ataques de un ejército de bots? ¿Tiene que contestar? ¿Debe ignorarlos? ¿Se resigna a quedarse con la calumnia que está almacenada en la nube? En términos legales no se puede hacer nada, más que un llamado a la cordura. Y en términos estratégicos, alinear su campaña en linea con la que tiene en otros medios. Es decir, si atacar o contra atacar lo marca su estrategia, en eso debe basar su decisión.