Debido a que ninguna autoridad ha apostado por rescatar la zona arqueológica de Xiutetelco, la mancha urbana lo ha invadido ya que se construyen cada vez más casas y negocios en los alrededores sin que alguien haga algo para salvaguardar las piezas.

En un recorrido realizado por CAMBIO Regionales se pudo constatar que incluso las piedras con las que fueron construidas las pirámides han sido utilizadas por los pobladores para atorar sus lonas en los días que instalan puestos, e incluso un taller mecánico se construyó casi encima de las mismas.

De las 13 pirámides, sólo permanecen a la vista cuatro, “que forman una i latina pero a través de la tradición oral se menciona que cada una de ellas está dedicada a un elemento que dé la vida”, según versiones de los vecinos del lugar.

Habitantes señalaron que por años actores políticos municipales y estatales han promedito rehabilitar la zona, y que incluso la diputada local Corona Salazar asumió el compromiso de hacer algo por este sitio durante su campaña, pero no ha cumplido.

Algunos de los habitantes han demandado intervención del INAH ya que existen versiones de que se pretende su destrucción para que el taller mecánico automotriz se pueda extender ya que le dueño del negocio presume que el predio es suyo.

El descontento de la ciudadanía se generaliza cada vez más, pues las mismas autoridades municipales han dado los permisos para que se coloquen comercios y viviendas, dejando que se pierdan los pocos vestigios de la cultura totonaca, aseguraron los vecinos.

Por las excavaciones que han realizado particulares para construir, han encontrado piezas prehispánicas.

El INAH tampoco ha hecho caso

Rafael Julián Montiel, encargado del museo Xiuhtecuhtli que se ubica en las inmediaciones, reconoció que el INAH tampoco ha hecho caso para una intervención y que según estudios realizados por historiadores y arqueólogos en Xiutetelco, este espacio consistió en un centro de ceremonial totonaco.