El director de la Policía municipal en la capital poblana, Paulo César Quiroz, negó la existencia de focos amarillos en las juntas auxiliares de la Resurrección y San Miguel Canoa, como lo advirtió el coordinador de regidores del PRI, Iván Galindo Castillejos, pese a que el lunes pasado hubo un intento de linchamiento en La Resurrección y de que la presidencia auxiliar en Canoa sigue tomada por un grupo de opositores al gobierno estatal.

Reconoció la existencia de algunos incidentes en dichas comunidades, sin embargo, dijo que se han evitado tragedias como la del municipio de Ajalpan, gracias a la reacción inmediata y la capacitación que reciben los elementos en la Academia de la Policía municipal.

En este sentido, informó que los cadetes durante su formación reciben una materia sobre “control de disturbios”, lo que les permite contar con la capacitación adecuada para reaccionar en un intento de linchamiento, como lo hicieron el lunes pasado en La Resurrección, cuando un grupo de habitantes intentó linchar a un ladrón de casa habitación, que al final fue resguardado por los policías y consignado por el delito de robo.

“Obviamente, todos nuestros elementos han pasado por una academia, en la cual tenemos una batería de materias, una de ellas, control de disturbios y multitudes; siempre debe caber la tranquilidad y el diálogo. No haría menos a los demás municipios, actuamos de manera oportuna, siempre mediante el diálogo, porque si bien en algunos casos quieren linchar a las personas, termina sucediendo cosas peores”.

Fue después de este intento de linchamiento en la capital cuando el coordinador de regidores del PRI advirtió al gobierno municipal sobre la necesidad de resolver conflictos pendientes en la Resurrección y San Miguel Canoa, que permitan prevenir barbaries como la de Ajalpan, en donde dos encuestadores fueron linchados y quemados vivos por la población, después de acusarlos, sin pruebas, de ser secuestradores.