Desde que iniciaron las obras, los empleados han denunciado constantemente falta de medidas de seguridad, lo que ha derivado en diversos accidentes, así como retrasos en sus pagos. 

La obra tuvo un costo de más de 688 millones de pesos, inyectados del erario público. El mandatario ha sido señalado como uno de los candidatos a la presidencia en 2018

Al recorrido acudió Martha Erika Alonso y Diego Corona

El empresario visitó Puebla con motivo de la reunión de la Organización Mundial de Presidentes, aunque la reunión fue de carácter privado, la visita se da a unos días de que el Gobierno del Estado lanzara la licitación para ofrecer al mejor postor el nuevo nombre del estadio Cuauhtémoc, después de invertir más de 730 millones de pesos en su remodelación

Ni Volkswagen ni Audi se interesaron en tener los derechos del nuevo nombre del estadio Cuauhtémoc, pues ambas armadoras despreciaron la denominación del Coloso de Maravillas, pese a que el gobierno morenovallista les ofreció directamente asumir el patrocinio, cuando comenzaron las obras de remodelación hace aproximadamente seis meses. 

Ante empresarios, el edil presenta las cartas que tiene para competir por la minigubernatura, el alcalde poblano fue invitado para dar a conocer los beneficios del proyecto de Smart City, considerado el eje de su gobierno para que Puebla tenga un crecimiento ordenado

Antes, mi generación pensaba que en el nombre de un estadio hay historia, tradición, remembranza. Para las nuevas generaciones, sin embargo, el nombre de un estadio o de un recinto es una cuestión de dinero. Mucho dinero. Una estrategia de marketing brutal, propia del capitalismo salvaje: apropiarse de los derechos de denominación de la casa de un equipo, al que semana a semana, acuden miles de aficionados. Esta estrategia de marketing, denominada naming es una costumbre que inició en Estados Unidos pero ya se extendió a prácticamente todo el mundo.

Atrás quedarán las casi cinco décadas en que los seguidores del Puebla FC llamaban “Estadio Cuauhtémoc” a la casa de su oncena futbolera, pues a partir del 29 de octubre tendrá un nuevo nombre el coloso que albergó dos Copas Mundiales, así como finales de Liga y Copa. Sumándose a la tendencia mundial de marketing conocida como el naming de estadios o recintos deportivos.

El gobernador detalló sobre la licitación que lanzaron para cambiar el nombre del Estadio Cuauhtémoc. “El inmueble es del Gobierno y nosotros lo que estamos buscando es tener un ingreso en virtud de que es un espacio público, evidentemente queremos lograr una mayor rentabilidad y brindarle un mantenimiento adecuado”, dijo el mandatario poblano

Señaló que al haberse terminado el convenio con la cervecería que le dio nombre al coloso en un inicio se dejaron de obtener ingresos para el estado, pues el estadio es propiedad del mis no y al no contar con un patrocinador no se estaba aprovechando esa ventana de oportunidad.