Luego de que CAMBIO evidenciara que la licitación del Tren Turístico Puebla-Cholula fue adjudicada a una de las empresas relacionadas con las fallas presentadas en la Línea 12 del Metro, la empresa constructora en cuestión, Impulsora Tlaxcalteca de Industrias (Itisa) SA de CV, se deslindó de los malos trabajos registrados en esta obra.

Mediante una carta enviada a esta casa editorial, el director general de la división de ferroviarios, Ari Sadovich, aseguró que la empresa en cuestión no participó como socio ni constructor de la Línea 12, ya que sólo fungió como proveedor de materiales.

Pese a su historial negativo en la prestación de servicios como los evidenciados en 2008 cuando fue sancionada por incumplir con el tiempo de entrega del Distribuidor La Virgen, del Distrito Federal (DF), obra que registró un atraso superior a los 6 meses, por lo que fue acreedora a distintas sanciones, Itisa aseguró que sus productos y servicios son de alta calidad.

Además, la empresa es señalada por la mala calidad de los durmientes, es decir, de las estructuras de concreto que sostienen las vías de este sistema de transporte (Metro), pues no cumplieron con las normas requeridas, pues fueron colocadas de manera errónea.

Ante esta situación, la carta expresa que de acuerdo al peritaje de la empresa francesa Systra, “los durmientes de Itisa que se rompieron, se trata de un problema de instalación y no de fabricación”.

No obstante, de acuerdo con los diagnósticos realizados por la empresa francesa Triacaud Societé Organissé (TSO), encargada de reparar las afectaciones, Itisa fue una de las dos empresas que aportó durmientes defectuosos en la Línea 12, a la que actualmente el Sistema de Transporte Colectivo da mantenimiento.

Cabe señalar que el contrato por 195.8 millones de pesos que el gobierno estatal le otorgó a la firma en cuestión, consiste en realizar adecuaciones a las vías del tren turístico Puebla-Cholula, puesto que los vagones de esta nueva vía férrea ya fueron adquiridos con anterioridad, así como la construcción de muros de contención en zonas donde sean necesarios y la rehabilitación de dos puentes en la zona de San Pedro Cholula.

Asimismo, la empresa también está obligada a supervisar por tres meses la correcta operación del ferrocarril.