Las 20 víctimas mortales del pasado fin de semana en la Carretera Interserrana ya descansan en paz. Sin embargo, hay cuatro sobrevivientes: una mujer y sus dos hijas quienes se encuentran hospitalizadas en Puebla en estado grave y ahora se conoce que también el chofer de la unidad accidentada está siendo atendido en el hospital de Zacatlán. Lo anterior fue confirmado en entrevista con la madre María Antonia Martínez Rivera, misionera Guadalupana del Espíritu Santo, pues ella convivió con todos los involucrados en la tragedia durante la peregrinación con la imagen de la Virgen de Guadalupe en la comunidad de Tonalixco donde se llevó a cabo un acto religioso.

La  hermana María Antonieta contó que todo transcurrió en calma, hasta que cinco minutos antes de llegar a su destino, la comunidad de Las Láminas, alrededor de las 17:00 horas una de las dos camionetas que transportaban a los fiscales y a los feligreses se volcó al chocar contra un cerro en la carretera Tepango de Rodríguez-Zapotitlán de Méndez, a la altura de la comunidad de las Minas, cerca del punto conocido como Cuatro Caminos.

Ambas camionetas viajaban en caravana, por lo que los tripulantes del otro vehículo regresaron a auxiliar a sus amigos y familiares, pero prácticamente todos perdieron la vida en el lugar.

Pese a la tragedia, los milagros también se manifiestan ya que sor María informó de las cuatro personas, tres mujeres y un hombre que aún están con vida.

Desafortunadamente la religiosa confirmó que en el accidente murieron todos los fiscales religiosos que eran aproximadamente ocho, entre ellos el fiscal mayor y su esposa que dejaron huérfanas a sus hijas de 12 y 14 años, quienes ahora quedarán al cuidado de sus abuelos.

Finalmente, señaló que todos los días se están llevando a cabo rosarios para pedir por el eterno descanso de las 20 víctimas y que éste va a concluir cuando se celebre el novenario de la tragedia que ha marcado a la Sierra Norte de Puebla.