OHL ha perdido todas las licitaciones en la federación


Revela Daniel Ortiz y Caso, delegado de la SCT federal


El funcionario salió en defensa de los constructores poblanos y aseguró que cuentan con la capacidad para ofrecer esquemas de concesión como las grandes constructoras nacionales e internacionales, siempre y cuando estén unidas


Efraín Núñez Calderón

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La constructora española OHL, a la que el gobierno del estado le entregó de manera directa la construcción, mantenimiento y operación del Libramiento Norte de Puebla, ha perdido los últimos concursos de licitación pública organizados por el gobierno federal, por lo que se ha decidido asignar obras importantes a otras empresas, reveló Daniel Ortiz y Caso, director del Centro SCT en Puebla.


En entrevista con Cambio, el funcionario calderonista salió en defensa de los constructores poblanos —tildados por el gobierno marinista como “faltos de creatividad”— al asegurar que cuentan con la capacidad para ofrecer esquemas de concesión como las grandes constructoras nacionales e internacionales, siempre y cuando estén unidas.


Además, advirtió que si el gobierno federal participa en la construcción de las carreteras Atlixco-Ciudad de México y Atlixco-San Martín Texmelucan —obras que la administración estatal pretende concesionar— éstas se realizarán bajo el esquema de la federación, es decir, con licitación de por medio:


“Desde 1994 las empresas mexicanas compiten con las nacionales. ICA tiene sus propias concesiones, IDEAL también, OHL tiene sus concesiones federales, bueno, las tendrá cuando las gane porque las ha estado perdiendo”, manifestó.


Más aún, confirmó que a través de la empresa Gana, en la que tiene acciones, la empresa OHL administra la autopista Amozoc-Perote, sin embargo, tuvo que participar en una licitación para poder obtener estos derechos:


“Sí hemos entregado obras por asignación directa, pero siempre siguiendo las excepciones de la ley. La regla es muy clara, todo se licita, menos cuando la licitación cause algún daño por el tiempo que se lleva, cuando haya problemas sociales, cuando haya patentes y cuando el monto de la obra sea muy pequeño, a 400 mil pesos y eso también tiene sus restricciones (…) Las carreteras Atlixco-San Martín y Atlixco-Ciudad de México estamos tratando que sean a través de una figura de concesión. Como aquí sí conectamos estados y participa la federación, se seguirán las reglas de la federación. Licitación necesaria, lo que diga la ley”, advirtió.


Aunque dijo que respeta la decisión que tomó el gobierno de Mario Marín, al entregar la concesión de la llamada negocarretera, destacó que la SCT federal privilegia y fomenta la competencia entre constructoras a través de los concursos de licitación:


“Hay la capacidad en los constructores poblanos para hacer este tipo de obras. De eso y más siempre y cuando se unan (…) La federación en su ámbito licita las obras grandes y chicas. Hacemos alrededor de 150 concursos por año en Puebla. Eso es fomentar la competencia”.


Ortiz y Caso mostró la documentación que respalda las cerca de 19 licitaciones que se llevan a cabo tan sólo en la Secretaría de Comunicaciones y Transportes en Puebla, en las que han llegado a participar entre 40 y 50 empresas.


Confió en que el resto de los estados a mediano y largo plazo se sumen a la federación y actualicen su normatividad en materia de Comunicaciones y Transportes para que se fomente la competencia entre constructores para acceder a las obras.


Sin embargo, señaló que aunque la legislación en la que se basa la concesión del gobierno del Puebla a OHL data de 1973, respeta las decisiones que tome el gobierno del estado:


“Si un estado se equivoca, esta no es la dependencia encargada de reclamarle (…) Cada estado tiene su propia legislación (…) Como Secretaría manejamos el paquete federal de leyes. Respetamos lo que hagan los estados”.


Manifestó que hasta el momento la SCT federal desconoce los pormenores de la carretera de 32 kilómetros que conectará la autopista México-Puebla con la Amozoc-Perote. No obstante, dijo que la dependencia federal sólo verificará que las construcciones estén bien hechas:


“Somos normativos, revisamos que las curvas del camino estén correctas, que los puentes aguanten, que las elevaciones sean lo suficiente para que el tráfico circule sin que se caiga. Si el gobierno del estado dio paso a OHL es una decisión gubernamental (…) Sabemos que el gobierno del estado está trabajando en esta obra pero los pormenores los sabremos después (…) Solo entramos al menos que hayan fondos federales aunque sea en una parte mínima (…) No sé si el gobierno del estado anunció sobre esta obra y si lo hizo, no necesariamente tiene que hacerlo en esta oficina. Hasta el momento no conocemos los pormenores del proyecto, los conoceremos en la oportunidad”.


Cambio publicó ayer que la especulación en la venta de los terrenos por donde cruzará la negocarretera que construirá OHL, representa una operación multimillonaria debido a que los predios aumentarán mil 100 veces su valor catastral, una vez que esté terminada la vía y se detonen emporios económicos como en la zona de Angelópolis.


En la actualidad, el valor catastral de la mayoría de estos terrenos —pertenecientes a ejidos y que sirven como tierras de labranza— en los municipios de Cuautlancingo y Coronango, va de los 3 pesos con 38 centavos a los 8 pesos con 45 centavos el metro cuadrado, sin embargo, cuando el Libramiento Norte de Puebla detone las primeras zonas comerciales, estos predios serán vendidos hasta en 4 mil pesos el metro cuadrado, que es el valor que actualmente tienen las tierras más caras en la Reserva Territorial Atlixcáyotl.

 


 
 
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