Los hechos nos dan la razón, ¿qué ideología política pueden tener los cinco diputados priistas que de buenas a primeras renuncian a su militancia partidista, se declaran independientes y piden que se les tome en cuenta como fracción dentro del Congreso local?

Desde que la “democracia” llegó al país, todos los partidos políticos empezaron a “mostrar el cobre”. Perdieron su ideología y algunos grupos empezaron a tomar actitudes de chantaje contra las decisiones de sus dirigentes, que están tan desideologizados como ellos.

Los nuevos políticos empezaron a cambiar de partido según su conveniencia, sin importar ideologías, pues sólo ha prevalecido en ellos el interés personal o de grupo.

Ahora ya ni el PRI es liberal, ni el PRD es de izquierda, ni el PAN es totalmente conservador y la “chiquillería”, como dijera Diego Fernández, pues es eso. Decimos que el PAN no es totalmente conservador porque se le han colado priistas y perredistas, aunque debemos reconocer que prevalece en sus filas la gente de derecha, por lo menos en ciudades como Puebla.

Eso no se debe a una labor de adoctrinamiento del panismo. No es que sigan la ruta que marcó su fundador don Manuel Gómez Morín de que los partidos deben ser escuelas de política, no, es porque en ciudades como ésta hay un fuerte sistema educativo de tipo confesional que forma niños y jóvenes con mentalidad conservadora, que aprenden la historia al revés de como se enseña en las escuelas públicas: Juárez le robó sus bienes a la Santa Iglesia e Iturbide es el gran libertador de México.

Vea qué escolaridad tienen los dirigentes panistas y los panistas de a de veras. No los que se adhirieron de un tiempo a la fecha donde hay de todo, principalmente fugados de otros partidos como el PRI, del que huyeron por las imposiciones que sus dirigentes hacían, y siguen haciendo, de candidatos y miembros de la dirigencia. Estos nuevos panistas son los que suavizan un poco las posturas intransigentes que un partido de derecha como el PAN generalmente tiene.

El partido que representa a la izquierda, el PRD, tiene la misma debilidad que se observa en el PRI y en el PAN. No tienen escuela de cuadros y para tapar el ojo al macho, dan cursitos de uno o dos días a sus diputados y presidentes municipales electos. A eso se concreta lo que el genio de Gómez Morín denominó “escuelas de política”.

De acuerdo a la reforma educativa, se exige ahora evaluaciones periódicas a los maestros y está bien, pero los políticos deciden cosas que afectan a cientos de miles o millones de personas y a ellos no se les realiza evaluación alguna. Debería hacérseles, aunque claro, hay el peligro de que todos o la inmensa mayoría repruebe y nos quedemos sin políticos y sin gobernantes.

Mientras tanto, pasamos lista a los diputados priistas que renunciaron al PRI y ahora son diputados independientes para que la historia los registre: Elvia Suárez, Zenorina González, Juan Manuel Jiménez, Felipe Ramón López e Iván Conrado y el jefe del grupo al que se adhieren, Alejandro Oaxaca Carreón.

El Instituto Nacional de Elecciones es un hecho

Todo parece indicar que la desaparición de los institutos electorales de los estados y la creación de un organismo electoral nacional, que organice y realice las elecciones federales y locales, es un hecho.

Están de acuerdo en eso los tres partidos firmantes del Pacto por México, PRI, PRD y PAN. No están de acuerdo los estados pues la creación del INE constituye un atentado a la soberanía de cada entidad federativa.

Además, va a complicarlo todo. Se creará una burocracia electoral monumental que en vez de resolver problemas va a crear otros de mayor envergadura. Va a ser lo mismo que el sistema educativo: se van a dictar órdenes desde escritorios en la capital de la república que van a afectar y a enojar a ciudadanos de todas las entidades del país.

Cada estado tiene su propia forma de “matar las pulgas”. ¿Qué va a hacer el Instituto Nacional de Elecciones cuando surja un problema en Xicotepec de Juárez, en Piaxtla o en Acajete, tres municipios de Puebla ubicados en la Sierra Norte, en la Mixteca poblana y en el centro, los tres completamente distintos uno de otro, con problemas diferentes, con grados de desarrollo distintos, con usos y costumbres que no coinciden? Tomar decisiones equivocadas y agravar los problemas.

Eso hacen los delegados del PRI que llegan a entidades desconocidas para ellos sin conocimiento de los grupos políticos que se mueven, sin sensibilidad para captar el sentir de sus militantes. Han sido —muchos, no todos— del surgimiento de problemas internos y lógicamente del debilitamiento de su partido.

Pero en este maravilloso país, como dijera el ínclito y preclaro ex presidente Fox, todo es posible en la paz. La decisión ya fue tomada por el Pacto por México. Lo demás es puro trámite.

Notas breves: ¿Será cierto lo que dice la diputada federal perredista, Luisa María Alcalde, de que atrás de todas las reformas llamadas estructurales está el súper-economista egresado del Instituto de Massachusents y ex secretario de Hacienda de Carlos Salinas, don Pedro Aspe Armella? Antes de que don Enrique Peña Nieto llegara a la presidencia, don Pedro afirmó en una conferencia: lo que el país necesita son reformas estructurales laboral, educativa, hacendaria y energética y, ¡oh! Sorpresa... Dice la diputada que esas reformas ideadas por la brillante mente de don Pedro son para beneficiar a un pequeño grupo de mexicanos, entre ellos a su ex jefe Salinas. No lo creemos porque Carlos Salinas siempre ha dado muestras de su amor por México y una prueba es que después de su mandato, dejamos de ser del tercer mundo, como cuando Echeverría y caímos en el quinto… Nicolás Dávila Peralta, un periodista de larga trayectoria que presta sus servicios en la Dirección de Comunicación Institucional de la BUAP,pasa a formar parte del personal de la Vicerrectoría de Extensión y Difusión de Cultura, al parecer en la dirección de Fomento Editorial. Estamos seguros de que llevará a cabo un buen trabajo… Al PRI sólo le quedan nueve diputados en el Congreso local, luego de la última desbandada. Nunca el PRI había estado en Puebla como ahora, tan debilitado, tan dividido, tan confrontado. Y estará peor en la próxima legislatura pues tendrá menos diputados de los que le quedan ahora.