Friday, 19 de April de 2024


Si quieren guerra, guerra tendrán, es la respuesta




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Pero Moreno Valle no es un flan sin huevos, y al grito de que si el PRI quiere guerra, guerra tendrán, anunció que de continuar las hostilidades él también echará a andar su maquinaria. Quien pensó que el gobernador de Puebla se iba a arredrar o a dar un paso atrás se equivocó  

 

A juzgar por las últimas señales, la metáfora del callejón de los madrazos empieza a quedarse corta para describir el choque de trenes entre el PRI/Federación y el gobierno morenovallista. Olvídense de las designaciones de los delegados federales, que de por sí ya es polémica. Tampoco del nombramiento del rudo rudísimo Fernando Moreno Peña como general en jefe de los ejércitos tricolores en la elección intermedia. Si el Diablo está en los detalles, la suspensión definitiva para las obras del teleférico en la Casa del Torno no es la gran noticia, sino quién la dio a conocer. No fue el juzgado Cuarto de Distrito en donde se sustancia el amparo indirecto, sino el boletín 2/2013 del Consejo de la Judicatura Federal. ¿Qué hace el órgano rector del Poder Judicial federal boletinando resoluciones de un juez de Distrito? ¿Por qué darle ese nivel?

 

 

Interpretando la resolución del juzgado Cuarto de Distrito, el gobierno estatal decidió reanudar las obras del teleférico en el resto del proyecto, respetando la suspensión de los trabajos en la Casa del Torno. Pero, ¿qué sentido tiene continuarlo si la Casa del Torno es la estación de descenso? ¿En dónde van a bajar los que tomen el funicular en el Centro de Convenciones? El juicio de amparo puede durar todo un año, así que de cualquier forma el teleférico no va a estar listo para el Tianguis Turístico. Haiga sido como haiga sido.

 

 

El lector atento no puede pasar por alto la cadena de acontecimientos que lleva al golpe contra el morenovallsimo: la suspensión definitiva de las obras en la Casa Roja, de acuerdo con el Consejo de la Judicatura, se decretó una vez que la Secretaría del Transporte no pudo acreditar los permisos del INAH para derrumbar el inmueble.

 

 

¿Y cómo arrancó el juicio de amparo indirectoque interpusieron la Fundación Manuel Toussaint AC, y Comité Defensor del Patrimonio Histórico Cultural y Ambiental de Puebla AC en su carácter de quejosos? Precisamente con un oficio firmado por el coordinador nacional de Monumentos Históricos, Arturo Balandrano Campos, con fecha del 28 de diciembre, en el cual se indica que el INAH emprendió un proceso administrativo para la suspensión de los trabajos del teleférico, dado que no se dieron permisos para éstos a solicitud de la investigadora Rosalva Loreto.

 

 

Como en la política no existen las casualidades, el mismo oficio del INAH que fue fundamento para iniciar el juicio de amparo, también fue causa de la suspensión definitiva de las obras en la Casa del Torno. Si esto no es una mano negra del monstruo de las mil cabezas que es la Federación, ¿entonces qué es?

 

 

Pero Moreno Valle no es un flan sin huevos, y al grito de que si el PRI quiere guerra, guerra tendrán, anunció que de continuar las hostilidades él también echará a andar su maquinaria. Quien pensó que el gobernador de Puebla se iba a arredrar o a dar un paso atrás se equivocó. No ha llegado el momento, pero también aspira a devolver golpe por golpe.

 

 

Decía el clásico Carl von Clausewitz que la guerra es un acto de fuerza para imponer la voluntad a otro, y que se define a partir de las intenciones hostiles de uno y otro bando. Así, una vez que el morenovallismo hizo sonar sus propios tambores, las intenciones hostiles de unos y otros ya son manifestaciones abiertas. ¿Qué sigue? Pues el teatro de las operaciones y el despliegue de los ejércitos.

 

 

Siguiendo al mismo Von Clausewitz, los elementos fundamentales de la guerra son, por una parte, los recursos materiales y humanos de los que se dispone, y por la otra, las motivaciones y la voluntad que los impulsa. Un ejército reducido aunque bien administrado y motivado puede ser letal, mientras que uno numeroso, desorganizado y sin moral, puede ser un batidillo. La historia militar es rica en ejemplos de guerras ganadas por la estrategia y la motivación, antes que por los recursos.

 

 

¿Y quiénes están más motivados en la guerra por venir? ¿Cuál de los dos bandos tiene las causas correctas? ¿Quién tiene más facilidad para allegarse de aliados, y cuántos frentes pueden atenderse al mismo tiempo? ¿El choque de trenes a quién beneficia y a quién perjudica?

 

 

El morenovallismo de por sí ha mostrado ser una fuerza totalizadora: absolutamente a favor o absolutamente en contra. Funcionará igual en esta guerra: aliados o enemigos absolutos. Se conocen sus formas de operar y sus mecanismos de presión. Pero del ortodoxo gobierno de Peña Nieto todavía se desconoce sus mecanismos de cooptación y sus formas de presión. ¿Serán más efectivas que las del gobierno local? Yo apuesto que sí.

 

 

La guerra, sin embargo, no arrancó hoy. Ni siquiera la semana pasada o el 1 de diciembre. El enfrentamiento tienen un origen concreto: el viernes negro en el que Elba Esther Gordillo decidió romper la coalición que ya había firmado con el PRI y el Verde en un berrinche, siempre con el objetivo de encarecer su apoyo. Ese día Peña Nieto decidió acabar con ella, así como con sus aliados. Que Dios nos agarre confesados.

 

 

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