Son los propios reos de los penales de San Miguel —ubicado en la capital— y de Tehuacán quienes gobiernan los centros de reclusión, controlando su seguridad, el uso de los teléfonos y asignaciones de área VIP, además de que existen pagos de cuotas para contar con protección y privilegios, reportó la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
Dentro de su Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciariacorrespondiente a 2012, que dio a conocer ayer, el organismo reportó que de los 101 reclusorios más poblados del país, tres se ubican en la entidad poblana: en Puebla capital, Tehuacán y Tepexi de Rodríguez, siendo los dos primeros los que presentan ingobernabilidad.
El penal de San Miguel reprobó con 5.84 por no cumplir, entre otras cosas, con la seguridad adecuada para atender incidentes violentos, insuficiencia del personal de seguridad y custodia, falta de personal femenino, para traslados y para cubrir las ausencias, vacaciones e incapacidades.
El organismo también detectó en su recorrido del año pasado la existencia de áreas de privilegios, de objetos y sustancias prohibidas, e internos que ejercen violencia o control sobre el resto de la población.
Además confirma cobros por parte de los custodios para protección, asignación de estancia, plancha para dormir y el uso del teléfono. El reporte también apunta que existen denuncias de acoso sexual por parte de las internas que no han sido atendidas, y es inexistente la separación entre hombres y mujeres en el área de visita íntima.
Tampoco existe una separación entre reos procesados y sentenciados. En general, la CNDH dio a conocer que estos dos espacios no son dignos para los reclusos porque no cuentan con elementos que abonen a una reinserción social como lo establece la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos.
En cuanto al área femenil de San Miguel, se reportó que no hay un espacio específico para visita conyugal. La capacidad de este Cereso es de 2 mil 205 internos, pero en el día de visita la población es de 3 mil 177 personas.
Tehuacán, reprobado en todas las categorías
En cuanto al penal de Tehuacán, la CNDH dio a conocer que tiene una capacidad de 475 reos, sin embargo hasta el 2012 alojaba a un total de 775. Reprobó con 5.07.
Reprobó en los cinco aspectos que calificó el personal de la comisión como en el área de integridad física y moral del interno con 5.7; estancia digna, 5.03; reinserción social del interno, 5.43 y grupos de internos con requerimientos específicos, 5.62, siendo las mujeres, adultos mayores e indígenas los más vulnerables.
Al igual que en el Cereso de San Miguel, en este centro penitenciario se cobran cuotas y son los reos quienes mandan, pues cuentan con las llaves de algunas áreas.
En contraste, el penal de Tepexi de Rodríguez —considerado de mediana seguridad— calificó con 8.5 en condiciones de gobernabilidad, aunque también cuenta con deficiencias en atención y en la prevención de la tortura y/o maltrato, pero a diferencia de las otras dos, esta cárcel cuenta con mayor vigilancia.
http://www.cndh.org.mx/sites/all/fuentes/documentos/programas/DNSP_2012.pdf
