Las expectativas son enormes.

 

 

El mismo alcalde se ha encargado de sembrar y abonar las más grandes perspectivas.

 

 

Inicia una travesía de cuatro años con ocho meses que desde este momento tiene la clara finalidad de posicionarlo como futuro gobernador del estado.

 

 

Tony Gali ganó una primera batalla que fue la puja interna por alcanzar la candidatura de la coalición “Compromiso por Puebla”. En el camino se quedaron Jorge Aguilar Chedraui, Pablo Rodríguez Regordosa, pero principalmente quedó rebasado el mismo Fernando Manzanilla Prieto, algo que en otro momento hubiera sonado imposible.

 

 

Gali rebasó por la derecha a todos los contendientes internos y demostró su habilidad indiscutible para posicionarse, para perfilarse a sí mismo.Tony es un formidable vendedor y el producto que mejor ofrece es él mismo.

 

 

De esa manera sedujo al jefe político del estado, de esa forma lo convenció de que él era el hombre indicado. La puja interna no fue menor. Los heridos quedaron postrados y las evidencias de las lesiones aún son evidentes.

 

 

Luego en la contienda constitucional Gali enfrentó a un hombre con excelentes números en conocimiento e intención de voto: Enrique Agüera Ibáñez quien fue víctima de sus propios excesos, la egolatría y la vanidad.

 

 

La puja electoral no fue un día de campo. Agüera tenía un capital y en torno suyo reunió un equipo que prometía dar batalla. Pero al ex rector y a su staff les invadió el pánico escénico y se “achaparraron” frente al aparato galista.

 

 

Tony se apuntó dos victorias en tan solo unos meses: la puja interna y la contienda electoral.

 

 

Hoy enfrenta un reto histórico y formidable: convertirse en el más grande alcalde que haya tenido Puebla. Y los retos que se propone a si mismo son enfrentar la inseguridad y la pobreza.

 

 

La inseguridad es el menor de esos problemas. Solo basta hacer un recorrido por cualquier colonia de Puebla para evidenciar el abandono en que se encuentran sus habitantes.

 

 

La seguridad de Puebla se recuperará con abundante vigilancia, que deberá percibirse en el número de patrullas y motocicletas que recorran avenidas y calles.

 

 

El otro problema es mayúsculo.

 

 

El reto de la pobreza es enorme. Y ese no es tan fácil de erradicar. La mejor obra públicano puede paliar la pobreza de miles de poblanos.

 

 

De nada sirve pavimentar calles con cemento hidráulico si quienes caminan por esas arterias viven en una miseria atroz.

 

 

Tampoco erradicará la pobreza cambiar los colores del mobiliario urbano. Para un hombre que busca trabajo es exactamente igual sentarse en una banca morada, que en una pintada de los colores azul, amarillo y demás de la gama oficial.

 

 

La única manera de erradicar la pobreza es creando empleos. Las Pymes y la creación de pequeños corredores de industrias sin chimeneas deben ser algunas de las prioridades de Gali.

 

 

Él como experto en temas fiscales y empresariales sabe de los requerimientos de los pequeños emprendedores que solo buscan un pequeño salvavidas para sacar adelante un proyecto o una pequeña empresa que ya está caminando.

 

 

La creación de pequeños corredores industriales en las juntas auxiliares puede detonar una nueva economía en cientos de colonias. Gali tiene la experiencia, el conocimiento y la visión para hacerlo.

 

 

Está frente a un reto formidable, frente a una oportunidad histórica.

 

 

Cacería sobre el Cártel de Sinaloa

 

 

La semana pasada publicamos en esta columna, que la aprehensión de Daniel Fernández Domínguez, alias “El Pelacas” quien plácidamente vivía en La Vista es parte de una nueva estrategia del gobierno peñista por acotar, por menguar el poder de Joaquín Guzmán Loera alias “El Chapo”.

 

 

Que el criminal sinaloense había llegada a la Cúpula de la revista Forbes gracias a la protección que los presidentes panistas Vicente Fox y Felipe Calderón le prodigaron. Y por supuesto del mismo Genaro García Luna.

 

 

Pero también escribimos que para la madre de las mafias, para el padre de los cárteles que es el PRI, esto simplemente es inaceptable. Hoy el gobierno federal demuestra la clara intención de menguar el poder de “El Chapo”.

 

 

Y la semana pasada insistimos: no se trata de aprehenderlo, solo de acotarlo. Está claro que para los gobierno estadounidense y mexicano “El Chapo” es mejor negocio suelto, que detenido.

 

 

Apenas ayer lunes los medios nacionales dieron cuenta de operativos de las “Fuerzas Especiales”, la élite de la Marina Armada y del Ejércitoen Culiacán Sinaloa, para detener a Ismael “El Mayo” Zambada compadre, aliado y consejero de Joaquín Guzmán Loera.

 

 

Como en el caso de La Vista, los operativos de horas recientes son otro movimiento para golpear al Cártel de Sinaloa.

 

 

Decenas de marinos, militares y helicópteros se desplazaron sobre Culiacán con la intención de detener a “El Mayo”. El diario Reforma informó en su portal que los uniformados recorrieron “hasta las alcantarillas” buscando al narco.

 

 

Una cacería sin parangón en el estado de Sinaloa.

 

 

El principal detenido es su jefe de sicarios, un sujeto apodado “El 19”. Para cuando usted este leyendo esta columna el otrora temible “19” debe estar “cantando” como nunca se imaginó. Vaya, debe estar cantando el Ave María en latín.

 

 

Sí, este es un nuevo episodio por menguar el poder de un cártel.

 

 

Y curiosamente la purga comenzó aquí, en Puebla.

 

 

Como siempre estamos a sus órdenes en cupula99@yahoo.com, sin mx.