También llamado el “punto cero”; como una aeronave que tiene la fuerza para llegar a su destino, pero ya no hay combustible para regresar.

Esta claro que los señores Vargas Guajardo pensaron detenida, detalladamente este punto. Una periodista crítica al statu quo presidencial siempre será una pasajera incómoda para cualquier concesionario de radio o televisión. Será sumamente difícil que una cadena formal abra las cabinas al equipo de investigaciones especiales que exhibió las adquisiciones inmobiliarias de Angélica Rivera Hurtado y Luis Videgaray Caso.

Sin embargo esta crisis en que la colocaron sus adversarios, puede ser una gran oportunidad para Carmen. Esta es la opinión sobre una probable solución.

Un primer paso para Aristegui sería la creación de una estación de radio por internet, que transmita, por supuesto, su informativo, pero que también pueda ser espacio y tribuna para otros comunicadores que se han enlazado en el proyecto México Leaks.

Tan solo el prestigio de la comunicadora llevaría a cientos de miles de cibernautas a conectarse a la nueva estación web.

Pero por supuesto esto no bastaría para llegar a los grandes sectores de la población. Y es aquí donde debe entrar el concepto de comercializar la información. Aristegui, puede y debe vender su noticiero a radiodifusoras independientes y regionales.

Las grandes cadenas, aquellas que poseen media docena de concesiones o más, tienen enormes compromisos con el aparato oficial. Empero los concesionarios de estaciones independientes en el Distrito Federal y regionales, aquellos que cubren las zonas metropolitanas de Hermosillo, Guadalajara, Monterrey, Puebla o Xalapa, pueden interesarse en comprar la señal del informativo de Aristegui para retransmitirlo.

En la lógica más elemental, para el aparato gubernamental es más fácil pactar, negociar o convencer a un solo concesionario, que a treinta o cuarenta empresarios regionales que compren la señal.

El entramado jurídico para la venta y retransmisión de la estación web quedaría en manos de especialistas con el esencial propósito de prever acciones oficiales de presión, coacción o censura.

Un entramado de treinta, cuarenta o más estaciones regionales daría a Aristegui y a su equipo de periodistas y colaboradores una penetración social mucho mayor que la ofrecida por el consorcio MVS.

A su vez, con esta modalidad, los concesionarios regionales podrían levantar estaciones que tienen índices raquíticos de audiencia. La oportunidad para un concesionario independiente de retransmitir el informativo de Aristegui, puede hacer de una estación anquilosada, una tribuna de vanguardia.

¿Difícil? sin duda; ¿complicado? en exceso. Pero tal parece que a estas alturas del juego es el único camino.

Asimismo el portal aristeguinoticias.com debe convertirse en una agencia de noticias que venda notas, entrevistas, reportajes, artículos y columnas exclusivas a todos los medios que deseen comprarlos.

Las puertas no se han cerrado para Aristegui y tal vez lo mejor que la haya pasado es el rompimiento con MVS, ya que la necesidad es la hermana de la inventiva y del encuentro de soluciones y espacios que antes no se habían visto.

La periodista debe atender a su naturaleza y vocación crítica y darse cuenta que insistir ante los señores Vargas Guajardo solo es prorrogar y sostener una fractura irreconciliable

Aristegui y Vargas caminan por rutas antagónicas e incompatibles.

Llegó el momento de la independencia, no solo periodística y editorial, sino tecnológica. El equipo de Aristegui noticias debe recurrir a las nuevas herramientas en búsqueda de la autonomía que nunca encontró en los canales tradicionales.

Pero, bueno, solo es una opinión.

Como siempre estamos a sus órdenes en Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., sin mx.