El Instituto Nacional Electoral (INE) no permitirá hechos violentos como los registrados en la elección de 2018, dijo la consejera Pamela San Martín al señalar que la violencia es inaceptable, más allá del número de casillas que fueron afectadas.

“No es aceptable tener elecciones en las que la forma de proceder el día de la jornada electoral sea violenta, las elecciones son el mecanismo para lograr la transición de poderes sin el uso de la fuerza, es un mecanismo institucionalizado de transición de poderes”, dijo.

Al visitar Puebla para la instalación del Consejo Local del INE, la consejera sostuvo que no aceptarán contextos de violencia como una normalidad, pero la seguridad en el proceso y la jornada electoral no le compete al instituto, sino a las autoridades de seguridad pública. 

“Nos compete garantizar que los distintos actores cumplan con las reglas que hemos dado en torno al proceso electoral, pero no nos corresponden tareas de seguridad pública, estas tareas le corresponden a las instancias de seguridad pública federal y estatal”, dijo.

Violencia del 1 de julio 2018 amerita cuidado para el INE

En conferencia de prensa con el consejero Marco Antonio Baños, San Martín señaló que el INE mantiene coordinación permanente con las distintas instancias de gobierno para garantizar las condiciones de seguridad, pues la experiencia del 1 de julio amerita cuidado.

Para las tareas de coordinación entre las autoridades electorales y de gobierno se designó al presidente de la Junta Local del instituto, Joaquín Rubio Sánchez, quien estará por un corto tiempo en Puebla, una vez que Marcos Rodríguez del Castillo regrese al cargo.

La consejera dijo que en el país hay un grave problema de seguridad, el cual no está asociado a un proceso electoral, pero consideró indispensable la coordinación con las autoridades y que los servidores públicos no se entrometan en la elección y la competencia.

Durante la jornada electoral del 1 de julio de 2018, se registraron hechos de violencia, robo de urnas, disparos al aire y quema de boletas electorales en distintas colonias de la ciudad de Puebla y algunos municipios del estado, como San Salvador El Seco y Tlatlauquitepec.