Jorge Estefan Chidiac se deslinda del narcoalcalde

Si se le comprueba a Rubén Gil sus nexos con el narcotráfico, debe ser “castigado severamente”

Efraín Núñez Calderón

Jorge Estefan Chidiac, diputado federal del PRI, se deslindó de Rubén Gil Campos al rechazar que sea padrino de su hija y sugerir que sea “castigado severamente” si se comprueban sus vínculos con el narcotráfico.

En entrevista con Cambio, el presidente de la Comisión de Hacienda en San Lázaro aseguró que como la gran mayoría de matamorenses conoce al alcalde detenido en la Unión Americana, sin embargo, negó haberlo apoyado políticamente para primero obtener la candidatura y posteriormente la alcaldía de Izúcar de Matamoros:

“No creo que haya un político poblano de buen nivel que no tenga una relación con él. Hasta donde yo sé es un exitoso empresario que llegó a ser presidente de Casa Puebla en Los Ángeles, y que dirigía muchos clubes de mexicanos organizados allá.

Tiene una empresa transportadora que le transporta al ejército de Estados Unidos (sic). Si existen otro tipo de cuestiones hay que investigarlas. Si existe un delito, debe castigarse severamente”.

Lamentó que se le pretenda desprestigiar al señalar una supuesta cercanía con su correligionario, y dijo que desconoce los vínculos de Gil con el narcotráfico, cargos por los que se le juzgará en la Unión Americana:

“Es lamentable que se pretenda vincular a un servidor de manera particular, lo único que se busca es desprestigiarme. No fui invitado por él a ser padrino de su hija, no asistí a esos 15 años. Se maneja que fue financiador de mi campaña.

No es cierto porque ni siquiera participaba políticamente Rubén Gil en esos momentos. Apenas nos conocíamos.

Fue revisado mi financiamiento por la autoridad electoral, es ridícula la versión. No tendría nada de malo si hubiera aceptado ir a los 15 años de la hija de quien era presidente de Casa Puebla en los Ángeles”.

Jorge Estefan aseguró que de haber sabido que Gil tiene vínculos con el crimen organizado, lo hubiera denunciado inmediatamente: “es ridículo que ahora todos quieren decir que tiene vínculos que no han sido comprobados, cuando todo mundo trataba con Rubén Gil. Hay que ser honestos, sinceros y no lucrar políticamente con esto.

No hay reporte de la Secretaría de Gobernación federal ni de la PGR. Los candidatos pasan por filtros, no hay denuncia de partido político. Nadie sabía de este tema. La conducta que tuvo en México no me dio nunca a entender que fuera narco”.

En su opinión, lo más importante es propiciar que haya gobernabilidad en Izúcar de Matamoros, propiciando que no se detenga las obras y nombrando un sustituto.

En tanto, Alberto Amador Leal, coordinador de los diputados federales priistas poblanos, consideró lamentable que nadie haya presentado la denuncia correspondiente cuando se suponía la relación de Gil con el crimen organizado: “Quienes lo sabían cometieron una gran omisión jurídica. Si alguien sabía debió de haber presentado la denuncia correspondiente. En el caso de un puesto de elección popular se requiere la carta de antecedentes no penales. Si alguien sabe que hay un impedimento legal, tiene la responsabilidad de presentar la denuncia correspondiente”.