La afición del Club Puebla, aquella que no llena el estadio, está divida por la venta por 35 millones de dólares del Club Puebla a los hermanos Arellano Hernández, propietarios del Grupo Arhe; por un lado, recriminan la salida del Puebla del Estadio Cuauhtémoc y por el otro, festejan la inminente compra-venta que hará TV Azteca de Grupo Salinas a los empresarios de Mazatlán, Sinaloa.

De acuerdo con una revisión realizada por CAMBIO a los comentarios de las redes sociales, usuarios de la interface opinaron sobre la venta del club, de hecho hay algunos aficionados que dicen: “Estoy más preocupado por la recompensa de Coca-Cola que por la venta del Club Puebla. ¡Perdón, Señor, perdón!”.

Otro seguidor camotero reconoció que nunca va al estadio: “Yo no voy al estadio desde hace años y tampoco hicieron mucho las directivas para convencernos de regresar”.

Además, también mencionaron que el equipo es ‘un lastre y una vergüenza para la ciudad’, mientras que otro más reconoció su molestia por una posible mudanza, sin embargo dejó en claro que el equipo no puede seguir con la pérdida de prestigio. 

“Que ni se empiece a quejar la gente porque no asisten al estadio. Seguramente el gobierno estatal les cerró la llave de apoyo económico y por eso lo venden. P.D. seamos honestos; es una caricatura del equipo que alguna vez fué!”, dijo otro amante futbolero.

Hay otro sector que pide el apoyo del gobernador Miguel Barbosa Huerta,  quienes también expresaron su tristeza ante una posible partida del club.

“Sr gobernador Barbosa, señores empresarios de Puebla no dejen que nuestro amado equipo del Puebla se vaya, hagan algo por nuestra franja”, fue el comentario de un seguidor camotero en Facebook, el cual fue respondido por otro que pidió a la afición más apoyo y menos críticas para el club.