Después de cinco años, por fin el estadio Cuauhtémoc tendrá otra vez alumbrado debido a que cuando se reinauguró por la administración morenovallista carecía de contrato con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), así lo dio a conocer el vicepresidente de Negocios del equipo, Rogelio Roa, quien también indicó que están viendo la posibilidad que se les regrese la concesión del estacionamiento del inmueble.

En un desayuno con medios de comunicación, el vicepresidente de negocios mencionó sobre el inmueble de la calzada Zaragoza que no contaba con energía eléctrica por más de un año, acentuando temas de inseguridad al finalizar los encuentros del Club Puebla, por lo que Roa Guzmán indicó que muchas veces los aficionados se acercaban en broma a decirles que pagaran la luz o llegaran a un acuerdo con la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

“El estadio no tuvo un año luz, por circunstancias; siempre decían de broma ‘ya paguen la luz’, pero ni siquiera era una cuestión nuestra, era una cuestión más política que estábamos rebasados. Afortunadamente ya se resolvió, un año, yo no conozco un estadio en el mundo que haya estado un año sin luz, bueno ya conozco uno: el Cuauhtémoc, y eso acentuó este tipo de cuestiones (inseguridad)”, mencionó.

En septiembre pasado, Rogelio Roa declaró para CAMBIO que desde el 24 de octubre de 2018 la Comisión Federal de Electricidad se negó a hacer un convenio para brindar el servicio al equipo deportivo, señalando que hasta ese momento se había solicitado al menos siete ocasiones por escrito un contrato de servicios, el cual había sido negado sin que se informaran los motivos.

La Franja no tiene control sobre el estacionamiento

Roa Guzmán señaló que el tema del estacionamiento ha sido un verdadero ‘dolor de cabeza’, indicando que la concesión del aparcamiento fue quitada por la actual administración gubernamental sin dar explicaciones, pero ya se está gestionando un acuerdo para volverse a hacer cargo de los cajones de estacionamiento y brindar una mejor experiencia a los aficionados que cada quince días se dan cita en el Cuauhtémoc.

“El estacionamiento sí ha sido un dolor de cabeza, es medio incoherente que cuando amplías el aforo no amplíes el estacionamiento, y no sólo eso, cuando nosotros tomamos el control de la administración el estacionamiento era parte de toda la gestión; pero la administración gubernamental optó por quitarnos la concesión por motivos que desconozco, y hoy no tenemos control de ese estacionamiento, estamos en gestiones para volverlo a tomar, pues la experiencia del aficionado empieza desde su llegada y hoy no tenemos control sobre esto”, refirió.