El Cartel de Sinaloa se enfrentó a la Sedena con armas de alto calibre para poder liberar a su líder, Ovidio Guzmán López.
El primero en ser agredido por la célula criminal fue el 94 Batallón de Infantería, integrado por 1 jefe, 1 oficial, 22 de tropa, 3 camionetas y 1 Humvve; este fue atacado por 30 hombres, 6 vehículos -2 blindados-, ametralladoras y armamento automático.
Como saldo, resultaron 3 elementos de tropa heridos -uno perdió una pierna-, una camioneta Cheyenne blindada recibió 23 impactos.
La siguiente agresión fue a personal de la Guardia Nacional; los uniformados se encontraron de frente con los criminales -40 hombres con ametralladoras, armamento automático y un fusil Barret-, quienes los atacaron de frente y de costado.
En este encuentro falleció un integrante de la Guardia Nacional; mientras que un oficial y 8 de tropa resultaron heridos.
La tercera agresión es a personal del 110 Batallón de Infantería; este se enfrentó a 40 hombres equipados con 8 vehículos -2 blindados-, ametralladoras y armamento automático.
El resultado fueron 2 elementos de tropa heridos y una camioneta con 2 impactos.
El cuarto ataque fue a un comandante de la Novena Zona Militar. Este, al recibir el reporte de que en la caseta de Costa Rica delincuentes habían detenido a personal militar, sale con su personal -2 oficiales, 47 de tropa y 6 camionetas-.
En su camino a la caseta señalada, es agredido por al menos 20 hombres que viajaban en 5 vehículos con armamento automático, en las calles México 68, Tulipán y Mezquitillo. Aquí resultó herido un elemento de tropa y una camioneta recibió impactos de bala.
También fue atacada la Unidad Habitacional Militar. Aquí llegaron 4 vehículos, que se colocan en los accesos de la unidad; estos abrieron fuego en contra de los edificios y lanzaron granadas de 40 milímetros que no explotan.
En la zona se encontraba un general de tropa jugando con niños. Cuando inician las agresiones, reúne a los pequeños y los mueve de lugar para ponerlo a salvo; sin embargo, los criminales los descubren y van tras ellos.
“Cuando llegan ahí, el sargento les establece que son niños, los dejan y lo retiene a él”, reveló el secretario de la Defensa Nacional, Luis Cresencio Sandoval.
La agresión número 6 se dio a un comandante de la 14 Compañía de Infantería Cuadrada, cuando se se dirigía a la unidad habitacional para reforzarla.
Fuente: Radioformula
Staff/ Diario Cambio
@Diario_Cambio