Recuerdo los tiempos de la escuela cuando se armaba la reta de futbol en el receso, siempre había un compañero que era un crack para eso de patear la pelota, quebraba cintura, le metía cuerpo a alguno y al tirar, el portero mejor se quitaba para no recibir un balonazo; todos querían estar con él, pero nadie quería jugar en su contra.

 

-Mejor ya no juego- decían las voces de varios niños en el patio escolar.

 

-Si va él ya para qué jugamos, nos van a ganar- se escuchaba como  reclamo.

 

Esta semana fue inevitable comparar ese pasaje de mi vida con la carrera a la gubernatura, después de que el senador Alejandro Armenta Mier se destapara con bombos y platillos para ser candidato a gobernador en Puebla por Morena; se escucharon los lamentos en pasillos panistas y priistas.

 

Son muchos los que dicen que si el senador es aspirante los del PAN enviarán un candidato al ‘matadero’, el PRI mejor ni se presentaría y evitarían una pérdida desastrosa.

 

-Ya para qué hacemos campaña- escuche decir a jóvenes blanquiazules.

 

El resumido paisaje hace que la verdadera pugna por la gubernatura de Puebla sea al interior de Morena y los comicios de junio se vuelvan un mero requisito.

 

-Hasta un ‘cheto’ gana la gubernatura en Morena- escribe una gran columnista iniciando la semana.

 

Aún con el presagio de victoria existen detractores como Gabriel Biestro que le pide a Armenta quedarse en su escaño del Senado. No provocó enojo el comentario del ex mandatario, si acaso la mofa de algunos morenistas, caso contrario el de los diputados Héctor Alonso, Yadira Lira, Inés Parra, Nelly Maceda, Miguel Trujillo, Arturo de Rosas y Valentín Medel quienes manifestaron su apoyo a las aspiraciones del senador poblano.

 

Algunos otros gritan a los cuatro vientos que el innombrable ex gobernador Mario Marín está detrás de las aspiraciones de Armenta. Desearía Marín que esta teoría conspiranoica fuera cierta, no está ni cerca.

 

La realidad es que todos los escenarios esperados se conjuntaron cumpliendo el sueño de cualquier político poblano. El efecto de Andrés Manuel López Obrador tiene a Morena como un partido consolidado y con fuerza; los más de millón y medio de votos conseguidos por Armenta en los pasados comicios lo ponen como el poblano más votado en la historia y la desvalijada priista que ve con buenos ojos su postulación han creado lo que desde hoy llamaré ‘El fenómeno armentista’.

 

Habrá que ver si puede más el capricho de Yeidckol de poner a Barbosa de nuevo en la boleta a pesar de la negativa que provoca su sola presencia o si serán escuchadas las cientos de voces que claman la crónica de una victoria anunciada de la mano de Alejandro Armenta Mier.

 

***

 

En la ya conocida sección texmeluquense:

 

Se han cumplido los 100 primeros días de gobierno municipal, los datos arrojan:

 

*Aumento en la inseguridad.

 

*Aumento del ambulantaje

 

*Caos vial en las entradas del municipio.

 

La tragicomedia texmeluquense apenas está iniciando y en el Ayuntamiento LA SILLA ESTA VACIA.