30 generaciones de estudiosos de la comunicación, unos en activo en medios: radio, televisión, prensa  escrita, producción, comunicación institucional, corporativa, otros convertidos en analistas, blogueros, emprendedores en distintos frentes, investigadores, regresaron al ‘Nido de las Águilas’ para recordar sus días de estudiantes.

Unos con kilos de más, otros con menos cabello, con expresiones marcadas que dan cuenta del paso de los años; los otrora chicos de Comunicación tuvieron  el mejor  reencuentro, olvidaron diferencias, intercambiaron números, cantaron, comieron, brindaron, bailaron y no se cansaron de sacar fotografías.

El rector en turno, Emilio José Baños Ardavín, acompañado de la directora de la Escuela de Comunicación, Cristina Gómez Vallarta, en su papel de anfitriones de la gran concentración, con satisfacción encabezaron el festejo que trajo a  alumnos y maestros procedentes de varios puntos de Estados Unidos y de toda la República Mexicana.

A la hora de los recuerdos fue obligado pasar lista con fotografía de los que ya emprendieron el viaje sin retorno.

Y a la hora de recordar a los maestros que más influyeron en su formación, de pie con un minuto de aplausos los comunicadores recordaron especialmente al maestro Manuel Díaz Cid.

Tarde de recuerdos, de nostalgia, de risas, emociones, que se prolongaron hasta después de las 10:00 de la noche en el Centro de Integración en el Barrio de Santiago, convertido en el Barrio Upaep.

Antes del adiós los chicos de comunicación pactaron volver a su nido, en el que hoy muchos disfrutan a su alma mater con sus hijos que ya cursan una carrera.