Están convencidos de que el ingeniero Alberto Jiménez Merino es un buen candidato, que el jefe de su campaña Valentín Meneses está trabajando con gran entusiasmo y que la dirigencia local priista trata de lograr la unificación del PRI en todo el estado, así como reconstruir su estructura, pero levantar al Revolucionario Institucional después de su derrumbe en el 2018 será sumamente complicado.

 

              Es muy posible que el PRI repunte en Puebla, en la elección de gobernador y que alcance el segundo lugar, pues en las pasadas elecciones se fue hasta el tercer sitio, pero no que logre el triunfo.

 

              Dijeron haber visitado varias regiones de la entidad y que en ese recorrido se dieron cuenta de que el candidato de Morena, Luis Miguel Barbosa, tiene la mayor intención de voto.

 

           “Las próximas elecciones serán unas elecciones de trámite”, señalaron, “pues la gente está con Morena pese a todo lo que se diga de ese partido”. El PRI está participando con espíritu deportivo, expresaron, en eso de “lo importante no es ganar, sino competir”. Lamentaron que la situación para el partido tricolor esté tan mal, pero su derrota a nivel nacional del año pasado fue una verdadera catástrofe.

 

             Sin embargo, el PRI no está muerto. Requiere, eso sí, dijeron, de un trabajo muy intenso para reconstruir y revisar su estructura y fortalecer su organización. Deben reconstruirse desde sus comités seccionales y municipales, hasta sus dirigencias estatales y la nacional, que es lo importante.

 

            Para la dirigencia nacional se pronunciaron a favor del gobernador de Campeche, ‘Alito’, Alejandro Moreno, pues consideran que le daría un nuevo enfoque al PRI. Tiene ideas frescas, liberales, progresistas, que es lo que ese partido requiere.

 

           Don José Narro es un muy buen elemento, pero está anclado al pasado. Él sería un continuador del sistema, cuyo fracaso quedó de manifiesto en la jornada electoral del 2018.

 

           Y por lo que respecta a la ex gobernadora de Yucatán, Ivonne Ortega, los decepcionó precisamente en el 2018, pues la apoyaron como aspirante a la candidatura para la Presidencia de la República y sin decirles nada al respecto, se retiró de la contienda interna.

 

         Estuvieron de acuerdo en apoyar los trabajos para la reconstrucción del priismo local y nacional, siempre y cuando los dirigentes tengan la sensibilidad y el oficio político necesarios para escuchar voces críticas.

 

          En Puebla tuvieron contacto con la secretaria general del Comité Estatal, Isabel Merlo Talavera, y tuvieron un diálogo abierto y respetuoso. No se han reunido con el candidato a la gubernatura, Alberto Jiménez Merino, pero ya lo hicieron con su coordinador de campaña, Valentín Meneses, en muy buenos términos. La pasada y la actual dirigencia del PRI no han entablado diálogo con ellos.

 

         La FROC poblana fue una de las centrales obreras más importantes de la región. Tuvo líderes como Manuel Rivera, Constantino Sánchez, Atilano Pacheco, Miguel Rojas, y muchos más y fue uno de los brazos fuertes del priismo, junto con la CTM y la CROM, las otras grandes centrales obreras.

 

           La CROM prácticamente está desaparecida, al caer su plaza fuerte en Puebla, Atlixco, en manos del PAN; la CTM sigue vigente. Actualmente es la que queda en pie de lucha del viejo sindicalismo de la era priista y la FROC, muy disminuida, prácticamente ha dejado de pertenecer al PRI.

 

           Ayer, esta central realizó un desfile en el centro de esta capital para celebrar el próximo Día del Trabajo (primero de mayo) y al terminar éste sin dirigentes fueron a una reunión con el candidato de Morena a la gubernatura del estado, Luis Miguel Barbosa, al que le ofrecieron su total respaldo.

 

         Ayer falleció en la Ciudad de México doña María de los Ángeles Moreno Uriegas, quien fuera la primera mujer en ocupar la presidencia nacional del PRI. Fue una economista destacada, diputada federal, senadora e integrante de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.

 

          Su fallecimiento a los 74 años fue sentido por políticos de todos los partidos. El presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, afirmó que además de una buena economista, fue una gran política, con quien tuvo una relación cordial y respetuosa cuando fue jefe de Gobierno del Distrito Federal y ella era integrante de la Asamblea Legislativa; a través de un mensaje en Twitter, el ex presidente Enrique Peña Nieto expresó las condolencias a sus familiares y la llamó “una gran mexicana”. Los dirigentes de todos los partidos políticos enviaron sus condolencias.