La madre e hijo que fueron asesinados el pasado viernes por la noche en el municipio de Atlixco y que eran trabajadores del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) serían parte de una venganza en contra de un sujeto detenido en 2013 por el secuestro del hijo de la ahora diputada local Mónica Lara Chávez.

Fuentes ministeriales revelaron esta línea de investigación luego de confirmar que María Guadalupe Ramírez Cerón, de 44 años, y Jonathan Lozada Ramírez, de 19 años, eran hermana y sobrino de Ernesto Wilfrido Ramírez Cerón, alias ‘El Neto’, detenido en enero del 2013 e internado en el Cereso de San Miguel.

María Guadalupe y su hijo Jonathan fueron asesinados la noche del pasado viernes 31 de mayo cuando llegaban a su casa en la colonia Valle Sur del municipio de Atlixco, donde sujetos a bordo de un automóvil les dispararon mientras descendían de su vehículo Nissan Sentra en la calle Álvaro Obregón.

Tanto madre como hijo fueron trasladados a diferentes hospitales por su familiares, sin embargo, antes de las 21:00 horas de ese mismo día se decretó el fallecimiento de María Guadalupe, mientras que Jonathan feneció la madrugada del sábado en un nosocomio de la ciudad de Puebla.

La Fiscalía General del Estado inició una investigación por este hecho y uno de los principales móviles que se estableció fue una venganza en contra del ‘Neto’, hermano y tío de las víctimas, pues aún dentro de prisión sigue identificado como uno de los principales operadores en la distribución de drogas.

Este sujeto fue detenido en 2013 junto con siete más, cuatro de ellos originarios de Guatemala, con los cuales cometió el secuestro del hijo de Mónica Lara Chávez, que en ese entonces era la directora del Instituto Poblano de la Mujer y que ahora se desempeña como diputada local en la bancada de Morena.

Ante esta situación también se ha reforzado la vigilancia para ‘El Neto’ dentro de la prisión en la capital poblana, pues trascendió que tras el asesinato de sus familiares, él también habría sido amenazado.