Sin que los vigilantes y enfermeras se percataran una persona de la tercera edad se escapó del asilo “La Divina Providencia” lugar que durante años se ha caracteriza por tener en óptimas condiciones a los abuelitos.

El septuagenario José Sabino Celso Caballero, decidió irse de este sitio sin avisar ni reportar nada, y su paradero aún es un misterio.

Su único hijo se encuentra viviendo en Tijuana por lo que solo envía dinero al asilo para asegurar sus gastos y poder cubrirlos, sin embargo su padre jamás se pudo acostumbrar a llevar una vida de encierro y soledad.