El Ayuntamiento de Tehuacán dejó pasar más de tres meses para remover de sus cargos a los jueces municipales; fue hasta el pasado 1 de marzo que el juez civil Ignacio Arturo Alatriste, y la juez de paz, Lina Saavedra Martínez, presentaron su renuncia al cargo, ambos fueron nombrados por la administración anterior.

De acuerdo con lo ventilado en el Cabildo donde se dio a conocer ambas renuncias, ésta resultaba “necesaria para tener bajo control las áreas correspondientes a la impartición de justicia”, señaló el secretario del Ayuntamiento, Luis Andrés Salgado Arreola, quien dijo que también hubo varias quejas en contra de los ex jueces, una de ellas tiene que ver con sus ausencias y la tardanza en dar trámite a los casos.

Indicó que el juez penal también tiene la misma petición de presentar su renuncia a la brevedad, pero no lo ha hecho; expresó que los ex funcionarios estuvieron conscientes de que su encargo terminó cuando finalizó el periodo de la ex alcaldesa Ernestina Fernández Méndez, por lo que no se opusieron a entregar su cargo.

Felipe Patjane Martínez, presidente municipal, dejó claro que si no se les separó del cargo antes no fue por descuido de su administración, sino porque se tenían que cumplir los tiempos administrativos; en tanto, la síndico municipal Laura Gallegos Martínez, señaló que entre las quejas que se presentaron contra los ex jueces hay algunas donde se acusa corrupción.

Destacó que no hubo ninguna queja formal ante la Contraloría Municipal, por lo que no se pudo documentar ningún señalamiento, al tiempo de admitir que por lo menos Alatriste Rosas es, aparentemente, familiar político de la ex presidenta municipal; la síndico afirmó que los juzgados municipales no quedan acéfalos, pues serán los secretarios quienes se harán cargo de los pendientes en cada oficina.