A sólo dos meses del 2019, la tendencia marca que por tercer año consecutivo se convertirá en el más sangriento, pues en el estado de Puebla se han registrado 229 asesinatos durante este primer bimestre, lo que representa un 157.3 por ciento más que en 2015, que sumó 89 decesos violentos.

En cuanto a las víctimas femeninas, han registrado una misma tendencia a lo largo de estos cinco años, siendo 2017 su pico más alto con 24 asesinatos; mientras que durante los dos últimos años se registraron 23 casos en cada año.

De acuerdo con los datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), durante este periodo se han registrado 33 menores de edad asesinados. 

En cinco años incrementan los asesinatos hasta en un 157 %

El gobierno federal, a través de la plataforma del SNSP, ha reportado que durante el primer bimestre del 2019 en el país se registraron cinco mil 803 víctimas de asesinatos, es decir, un caso cada 14 minutos. Esto representó un aumento del 13 por ciento en comparación al mismo periodo del año pasado, cuando se registraron cinco mil 113 asesinatos.

Al igual que la tendencia nacional, en el estado de Puebla el número de asesinatos se ha incrementado considerablemente en los últimos cinco años, al pasar de 89 casos en 2015, a 229, lo que ha representado un aumento del 157.3 por ciento en el número de víctimas.

Este incremento en el número de muertes violentas, clasificadas como homicidios dolosos o feminicidios, va de la mano con el ingreso de grupos del crimen organizado quienes se disputan el control de la plaza de Puebla en varios ramos delictivos: el huachicoleo, el narcomenudeo y el robo a transportistas.

Actualmente en el estado de Puebla se ha realizado el levantamiento de cadáver de una víctima cada 6.1 horas en promedio, mientras que el año pasado la incidencia era de una hora más, lo que lleva a sospechar que el 2019 se convierta en el más violento, superando al antecesor por tercer año consecutivo, ya que desde el 2017 esta tendencia se ha ido superando año con año.

En cuanto a la tasa de asesinatos en donde las víctimas han sido mujeres, sin necesariamente haber sido considerados feminicidios, a excepción del 2015, la tendencia ha superado los 20 casos, siendo el 2017 con la mayor cantidad de incidentes, 24. Mientras tanto en este 2019 se han sumado 23 casos.