Mientras Rosa le hace compañía a su hija Alexa Belén en una cama del Hospital del Niño Poblano, su padre y principal sospechoso de haberla envenenado a ella y a sus hermanas continúa libre y sin que esté siendo investigado formalmente por la Fiscalía, pues hasta el momento la autoridad ministerial no ha concretado la carpeta de investigación.

Ante esto, la presidenta honoraria del Patronato del Sistema Estatal DIF, Rosario Orozco Caballero, instruyó para que el Gobierno del Estado cubra los gastos de atención médica para la niña Alexa, quien se debate entre la vida y la muerte.

Con el apoyo de decenas de poblanos que llegaron hasta el Hospital del Niño Poblano para llevarle medicinas, dinero, comida y ropa, Rosa narró a CAMBIO que de momento lo más importante es la recuperación de la más pequeña de sus hijas, pues las otras dos ya fueron dadas de alta.

Alexa mejora, sus hermanas ya están en casa

Según explicó Rosa en breve entrevista a las afueras del Hospital del Niño Poblano, tras dos días de haber estado hospitalizada en el Hospital General de Zacatlán, sus hijas Aimar de 9 años y Wendy de 6, ya fueron dadas de alta y se encuentran a resguardo de su familia para permitir que ella pueda estar en Puebla al pendiente de Alexa Belén, de 3 años.

“Las dos más grandes ya fueron dadas de alta de Zacatlán, ya las llevaron a Tetela (de Ocampo) y están bajo la custodia de mi hermana, ella las está cuidando y la que está grave es la chiquita, Alexa Belén, ahorita está un poquito grave (...). Yo quiero imaginar que ya va un poquito mejor”, reveló Rosa.

El último diagnóstico que le fue explicado a Rosa arrojó que la menor ya se encuentra mejor, sin embargo, deberá mantenerse bajo observación médica hasta que se logre desintoxicar completamente su cuerpo.

A la par continúan realizándose los análisis correspondientes para saber cuál fue la sustancia que intoxicó tanto a Alexa Belén como a sus hermanas Aimar y Wendy, quienes sufrieron la reacción mientras estaban tomando un yogurt que minutos antes les había ido a dejar su padre, de nombre Alberto.

“Lo que habían comido pues solamente era la cena, que eran tostaditas de atún con mayonesa y chicharitos, en la mañana comieron lo mismo, máximo de a dos o tres tostadas, pero lo que ingirieron fue el yogurt, que fue rápido”, pero además, dos perros de raza pequeña que tenía la familia murieron al comer el lácteo que dejaron las niñas.

Hasta el momento sólo existe una predenuncia

Sin que Rosa conozca el paradero de Alberto, el padre de las menores y originario de Veracruz, hasta el momento la Fiscalía General del Estado no ha actuado para impedir la sustracción de la ley de este sujeto, quien podría ser considerado como el principal sospechoso de la intoxicación de la que fueron objeto sus hijas.

Aunque la misma Rosa confirmó que tras su separación de Alberto hace tres años, este sujeto no frecuentaba a las pequeñas y rara vez les llevaba comida, además incumplía con las obligaciones económicas como padre.

“De vez en cuando iba, pero muy de vez en cuando, pero casi no. Les pasaba a dejar galletas o leche, pero hasta ahí y todo era normal, todo estaba bien, pero no sé qué le pasó ahorita, pero mi niña dice que él se los dio, entonces sería la palabra de mi niña contra la de él”, resaltó.

En ese sentido, dijo no conocer el paradero de Alberto, además de que hasta el momento solamente existe una predenuncia que se inició en el municipio de Zacatlán al momento en el que ingresaron las menores al hospital, sin que la investigación se haya formalizado.

“En Zacatlán, allá me levantaron una predemanda, así me dijeron, y dijeron que la prioridad era las niñas, que en cuanto sepamos qué va a pasar con Alexa Belén yo fuera a presentar la demanda en el lugar donde corresponde (Tetela de Ocampo). Ya me dijeron que si allá no me atienden que vaya a Zacatlán para que me atiendan”, explicó.

Adicionalmente, Rosa explicó que una persona que se identificó como de gobierno se encargó de inscribirla para que no tuviera que pagar ningún servicio del Hospital del Niño Poblano, además se comprometió a darle seguimiento a su caso, el cual deberá ser atendido en breve por la Fiscalía para fincar las responsabilidades correspondientes en caso de que se confirme la intoxicación con dolo de Alberto en contra de las tres niñas.