La alcaldesa Claudia Rivera Vivanco aseguró que las cercas que están instalando los vecinos de distintas colonias como Real del Monte, Bella Vista y la junta auxiliar de San Jerónimo Caleras, están prohibidas y además en lugar de combatir la delincuencia, cierran la posibilidad de que el municipio apoye a solucionar distintos problemas sociales.

En entrevista, Claudia Rivera aseguró que estas medidas que están utilizando los ciudadanos están prohibidas por el Ayuntamiento de Puebla, pues además de atentar contra el libre tránsito de los demás ciudadanos, también complica las labores del Ayuntamiento en cuanto a las llamadas de emergencias que reciben.

“Sigue siendo la parte normativa la misma, están prohibidas porque no le cierran el paso a la delincuencia y se le cierra el paso a la oportunidad de apoyar, de acompañar a cualquier otra persona, a cualquier otro ciudadano y apropiarnos del espacio público”, señaló la alcaldesa.

La alcaldesa refirió que los principales llamadas de emergencia que se ven afectador por esta decisión de los vecinos, son las emergencias médicas, pues debido a la obstrucción vial que ocasionan las cercas incrementa el tiempo de reacción de los servicios médicos en llamadas de auxilio, y en lugar de estar contrarrestando la incidencia delictiva, están privando a otros ciudadanos de que sean atendidos por el gobierno.

“Ante una emergencia de salud que han reportado en las calles que son privadas, el tiempo de respuesta de una ambulancia se vuelve enorme, o sea, se vuelve en una situación muy complicada, desafortunadamente ha ocurrido y ha aumentado por el incremento de estas rejas”, puntualizó la alcaldesa.

Pese a que no existe la emisión de permisos para la instalación de esta cerca y están prohibidas por obstruir el libre tránsito, pese a esto la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad no realiza la demolición de las estructuras, pues dicha dependencia sólo ha clausurado 14 rejas en lo que va de la administración.

En un recorrido realizado por CAMBIO, se documentó la presencia de cercas instaladas en la colonia Bella Vista por los mismos vecinos, son cuatro estructuras metálicas en las calles Rafael Serrano y Mariano Echeverría y Veitia, entre las avenidas 23 y 29 Oriente; además,  se tiene reporte de una cerca más instalada en la calle Flores Magón y la Segunda Privada de Topoya de la junta auxiliar de San Jerónimo Caleras, y seis más en la colonia Real del Monte, en colindancia con los bulevares San Felipe y Hermanos Serdán.

Los vecinos de las colonias mencionadas han adoptado esta medida por la creciente en los índices delictivos de las zonas en que habitan, principalmente por los asaltos a peatón, robo a casa habitación o incluso robo a negocios; pero al realizar estas acciones están infringiendo la ley, pues obstruyen el libre tránsito vehicular y peatonal.

Según información proporcionada por la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad a esta casa editorial, la dependencia aseguró que no tienen la facultad de otorgar permisos para la instalación de rejas o cercas que bloqueen el paso vehicular o/y peatonal en un punto específico de la capital poblana.

“Que derivado del análisis de la información que solicita, hago de su conocimiento que la Secretaría de Desarrollo Urbano y Sustentabilidad, a través de la Dirección de Desarrollo Urbano y a su vez del departamento de Licencias Mayores y Menores, no tiene la facultad para emitir ningún tipo de licencia referente al cierre de calle con rejas o cualquier tipo de objeto que impida el libre tránsito vehicular o peatonal”, dicta el documento.

En el mismo documento, la dependencia dio a conocer que el total de quejas que han recibido por la colocación de rejas en vía pública del 15 de octubre de 2018 a la fecha han sido siete, y han notificado y clausurado un total de 14 cercas que impedían el libre tránsito peatonal y vehicular; cabe destacar que en el documento proporcionado por dicha dependencia no se especifica la ubicación de las rejas retiradas.

Es importante mencionar que la clausura de dichas estructuras no significa que éstas hayan sido removidas por la dependencia, pues después de que los vecinos son notificados por poner una estructura que obstruye el libre tránsito, el caso pasa a la Sindicatura municipal donde se emprende un juicio para que el o los ciudadanos involucrados argumenten la razón del hecho, posteriormente se procede a la clausura de la construcción y se notifica a los involucrados; y como última instancia se realiza el retiro de la reja.