Las oficinas centrales del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el delegado en Puebla, Jesús González Izquierdo, tiraron a la basura una inversión de más de dos mil millones de pesos, tras cancelar el proyecto del nuevo San Alejandro en el edificio de CIMA a la constructora Sacyr y optar por otras opciones para su edificación.

El gobierno federal, a cargo del entonces presidente de la República, Enrique Peña Nieto, pagó 400 millones para comprar el nosocomio CIMA, ubicado en San Andrés Cholula. Etiquetaron recursos por mil 647 millones 888 mil 751 pesos para la construcción de dos hospitales para la empresa Sacyr construcción México SA de CV.

Dichas inversiones están por irse por la borda, luego de frenar la construcción del nuevo nosocomio San Alejandro, al revocar el fallo de licitación a favor del conglomerado Sacyr.

Edificio de CIMA, en el abandono

Las obras en el edificio de CIMA fueron paradas totalmente desde del pasado 20 de febrero y en el lugar ya no hay ni maquinaria de la empresa constructora, tras cancelarles el contrato de construcción. Lo único que hay es el ‘cascaron’ del edificio.

  El 19 de noviembre CAMBIO publicó cómo se encontraba el terreno del nosocomio que sería destinado para albergar el nuevo San Alejandro, se observó que fueron eliminadas las paredes de los edificios que ya estaban construidos, quedando sólo la estructura para que pudiera ser adaptada al nuevo diseño del hospital.

Hasta el día de hoy se puede observar que no modificaron mucho, aunque desde julio del año pasado Sacyr había ganado el contrato y el gobierno federal había destinado los primeros recursos para la obra.

Cabe señalar que debido a esta cancelación, el delegado Jesús Gonzaález Izquierdo anunció que se tenía opciones a corto, mediano y largo plazo, como construir un nuevo hospital en la zona de la Margarita —en un terreno que está en litigio—, utilizar una parte del viejo San Alejandro y hasta llevarse el hospital al municipio de Amozoc.