La euforia se fue apagando poco a poco en el búnker de Martha Erika Alonso Hidalgo, quien tras el cierre de las casillas a las 18:00 horas del primero de julio se proclamó ganadora de la contienda por la gubernatura del estado, con un margen apretado, de acuerdo con sus encuestas sobre Miguel Barbosa Huerta.

Junto con la noche, el escenario de incertidumbre fue oscureciéndose conforme más encuestas de salida otorgaban la ventaja al candidato de Morena, en especial cuando Televisa recalculó el sondeo preliminar elaborado por Consulta Mitofsky que en un inicio daba un empate técnico entre ambos, para darle la ventaja al lopezobradorista por hasta 11 puntos.

Alrededor de las 21:00 horas los mariachis en el punto de reunión de Por Puebla al Frente callaron tras la publicación en cadena nacional de los resultados preliminares; el equipo de Alonso Hidalgo determinó cancelar una rueda de prensa programada a las 21:10 horas.

Fue cerca de las 20:15 horas cuando Martha Erika Alonso arribó al salón Azahares del Hotel Marriott, en donde las huestes morenovallistas, operadores políticos y algunos candidatos a las diputaciones locales y federales la esperaban en un ambiente de júbilo ante la ventaja que encuestadoras como Mercaei, Parametría y Mendoza Blanco y Asociados le otorgaban, gracias a las cuales un par de horas antes la panista se había declarado triunfadora.

Del júbilo a las caras largas en 10 minutos

En su discurso triunfal, Alonso Hidalgo agradeció a sus colaboradores y coequiperos el apoyo a su candidatura durante los 60 días de campaña con miras a Casa Puebla y les pidió un último esfuerzo para pasar la noche en vela, cuidando el conteo de votos.

Asimismo, la abanderada de la coalición integrada por el PAN, PRD, MC, PSI y Compromiso por Puebla señaló una vez más como mentiroso a Miguel Barbosa, al asegurar que trataba de engañar a los poblanos declarándose como triunfador, cuando la ganadora de la contienda había sido ella.

Rodeada de su equipo de campaña y colaboradores más cercanos, Alonso Hidalgo se despidió sonriente y con las manos en alto, incluso su equipo de comunicación, una vez terminado el festejo, preparaba el siguiente ‘bombazo’ mediático con las encuestas de salida que les favorecían y ponían a la panista con una ventaja apretada, no mayor a cuatro puntos sobre Miguel Barbosa, con una rueda de prensa programada para las 21:10 horas.

Sin embargo, el balde de agua fría cayó en las espaldas morenovallistas apenas unos minutos más tarde y aun con los gritos de “Martha, gobernadora” en las gargantas blanquiazules, pues apenas regresaban al área de prensa cuando cerca de las 21:00 horas Televisa nacional dio a conocer el sondeo de salida elaborado por Consulta Mitofsky y en el que la tendencia ya lucía revertida.

El júbilo se tornó en zozobra, las carcajadas se transformaron en ‘caras largas’, las expresiones a todo pulmón de “Martha, gobernadora” se tornaron en gritos ahogados de un “¿qué pasó?”, los brazos al aire en señal de triunfo descendieron para cubrir los rostros de incredulidad de los colaboradores de Martha Erika Alonso.

De manera abrupta, los preparativos para seguir cantando victoria fueron cancelados pues a pesar de haber convocado a una rueda de prensa, que fue cancelada de inmediato tras la publicación de la encuesta de salida en la que la candidata de Por Puebla al Frente apareció por debajo de Miguel Barbosa con una diferencia de 11 puntos.

La encuesta de salida elaborada por Mitofsky que desmoronó el ‘castillo de naipes’ del morenovallismo colocó a Martha Erika Alonso con 38 puntos porcentuales contra los 49 obtenidos por el lopezobradorista.